ROMA, 14 Sep. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Gloria Moreno) -
El principal aliado de Silvio Berlusconi y líder del partido secesionista Liga Norte, Umberto Bossi, reivindicó ayer el derecho a la independencia de la Padania, la zona que agrupa a las principales regiones del norte del país.
"¡Sabemos que un día la Padania será un Estado libre, independiente, soberano!", exclamó Bossi en la fiesta de los pueblos padanos que tuvo lugar en la ciudad de Venecia (noreste de Italia).
Las palabras de Bossi sorprendieron a no pocos miembros del Partido de la Libertad (PDL), el partido que lidera Silvio Berlusconi, quien necesita la alianza con la Liga Norte para poder gobernar.
Muchos en el PDL consideran que Berlusconi está dando demasiadas concesiones a Bossi, cuyas demandas parece que siempre van a más, tal y como demuestra su alusión a la futura independencia de la Padania.
En el mismo mitin, otro de los líderes de la Liga Norte y actual ministro de Interior, Roberto Maroni, lanzó un claro mensaje a Berlusconi, asegurando que la Liga Norte "no tirará la toalla". "A Berlusconi le decimos que no se deje asustar, que siga adelante y mantenga estrecha la alianza con nosotros", fueron sus palabras.
Precisamente, la semana pasada, el segundo de a bordo del PDL, Gianfranco Fini, pidió a Berlusconi un cambio de rumbo y discrepó en relación con algunas de las medidas más polémicas que ha adoptado el Gobierno bajo la influencia de la Liga Norte.
Sin embargo, es la inesperada intervención de la Unión de Demócratas de Centro y Demócratas Cristianos (UDC), la que más dudas ha sembrado en la escena política italiana, tras las declaraciones de su líder, Pier Ferdinando Casini, quien hizo alusión a una posible "nueva mayoría" parlamentaria.
Si Casini abre la puerta, cosa que hasta ahora no había hecho a pesar de las insinuaciones que le había lanzado el PDL, Berlusconi podría plantearse la posibilidad de romper la alianza con la Liga Norte y sustituirla por la UDC.
