AMÁN, 2 Ago. (Reuters/EP) -
El ministro de Exteriores de Jordania, Ayman Safadi, ha aclarado este jueves que la frontera con Siria permanecerá cerrada, a pesar de que el Gobierno de Bashar al Assad defiende que se puede reabrir ahora que ha reconquistado las provincias meridionales, por considerar que la situación en el país vecino aún debe "estabilizarse".
El cruce de Nassib está clausurado desde 2015, cuando los rebeldes sirios de hicieron con su control. Las tropas 'assadistas' lo han recuperado en el último mes gracias a la exitosa ofensiva lanzada sobre las provincias de Deraa, Sueida y Quneitra.
El régimen de Damasco ha notificado esta semana a las autoridades jordanas que la carretera de Nassib está lista para recuperar su tráfico transfronterizo, a lo que Safadi ha contestado este jueves rebajando las expectativas de sus vecinos sirios.
"Jordania, en principio, quiere fronteras abiertas con todos sus vecinos, pero el cuándo y el cómo dependerá de que podamos garantizar nuestros intereses y nuestra seguridad", ha dicho en la rueda de prensa que ha ofrecido junto a su homólogo francés, Jean-Yves Le Drian, de visita en Jordania.
"Gestionaremos la petición (del Gobierno sirio) con todo el optimismo que sirva a nuestro intereses (...) pero las cosas tienen que estabilizarse", ha subrayado el jefe de la diplomacia jordana.
Este mismo jueves las fuerzas jordanas han informado de que en las últimas 24 horas se han producido enfrentamientos con combatientes sirios del Ejército de Jaled Bin Walid, vinculado a Estado Islámico, muchos de los cuales han muerto, aunque no ha aportado una cifra concreta.
Las fuerzas israelíes han anunciado horas antes de que el miércoles por la noche llevaron a cabo un ataque aéreo en los Altos del Golán que se saldó con siete muertos de este mismo grupo armado, que pretendía atacar objetivos en el Estado judío.
