La junta ordena a sus embajadores que se reúnan con AI y HRW para promover el "entendimiento"

Actualizado: lunes, 9 junio 2014 14:00

BANGKOK, 9 Jun. (Reuters/EP) -

La junta militar ha ordenado a sus embajadores en Reino Unido y Estados Unidos que se reúnan con Amnistía Internacional (AI) y con Human Rights Watch (HRW) para promover "el entendimiento" con el nuevo régimen castrense, que acabó con el anterior gobierno con un golpe de Estado el 22 de mayo.

Varios gobiernos occidentales han denunciado el golpe de Estado y han exigido el retorno inmediato a la democracia. Los grupos de defensa de los Derechos Humanos han pedido al Consejo Nacional para la Paz y el Orden (CNPO) que restrinja sus competencias y deje de perseguir a civiles.

"El CNPO ha ordenado a sus embajadores en Nueva York y Londres que se reúnan con representantes de Human Rights Watch (HRW) y Amnistía Internacional (AI) para promover el entendimiento", ha afirmado el portavoz de la junta militar, Yongyuth Mayalarp, en declaraciones a la prensa.

Los representantes de AI y de HRW han confirmado que han sido invitados a reunirse con los embajadores en Estados Unidos y Reino Unido. En Tailandia, la junta militar ha convocado a los activistas de Derechos Humanos y les ha advertido de que no deben hablar con los medios de comunicación extranjeros.

El líder de la junta militar y jefe de Estado Mayor del Ejército de Tierra, el general Prayuth Chan Ocha, mantiene que tomó el poder con el objetivo de restablecer el orden tras casi siete meses de crisis política en un país dividio.

El general Prayuth tiene previsto reunirse con diplomáticos extranjeros este miércoles para explicarles los planes que tiene su administración. La junta militar ha ordenado a los partidos políticos que suspendan sus actividades a partir de este lunes.

El golpe de Estado ha sido el último capítulo en una lucha de poder entre los detractores y los partidarios de Yingluck Shinawatra, exprimera ministra y hermana menor del también exprimer ministro Thaksin Shinawatra, derrocado en 2006 por otra toma de poder por la fuerza y condenado por corrupción en 2008.