BOSTON (ESTADOS UNIDOS), 23 Abr. (Reuters/EP) -
El presidente de Ruanda, Paul Kagame, ha afirmado este martes que es muy pronto para decir si buscará un tercer mandato consecutivo al frente del país, agregando que "ocurra lo que ocurra, habrá una explicación".
Varios diarios progubernamentales han indicado en los últimos meses que Kagame podría presentarse a las elecciones una vez que su mandato acabe en 2017, lo que ha sido criticado por la oposición por ir contra la Constitución, que tendría que ser enmendada a tal fin.
"Se me ha preguntado si voy a abandonar el poder desde el momento en el que llegué. Es como si estuviera aquí para irme. Estoy aquí para trabajar en nombre de los ruandeses", ha dicho, durante un encuentro con estudiantes en la Universidad Tufts de la ciudad estadounidense de Boston.
"No sé qué más puedo dar sobre eso, pero habrá que esperar y ver qué ocurre. Ocurra lo que ocurra, habrá una explicación", ha sostenido el mandatario africano.
Kagame ha dado varias conferencias en la ciudad estadounidense para hablar sobre el proceso de recuperación del país tras el genocidio de 1994, en el que murieron más de 800.000 personas, la mayoría de ellas miembros de la minoría tutsi y hutus moderados.
La masacre se extendió durante cien días a partir del 6 de abril de 1994, poco después del fallecimiento del presidente Juvenal Habyarimana (miembro de la mayoría hutu) al ser derribado su avión cuando sobrevolaba Kigali.
Los asesinatos llegaron a su fin en julio de 1994 cuando los milicianos del Frente Patriótico Ruandés, liderado por Kagame, entraron en la capital ruandesa desde Uganda y se hicieron con el control del país.
"Lo que hemos aprendido es que la gente ha de ser responsable de su propio destino. Si se espera a los intrusos, perecerás", ha dicho, antes de acusar a la "comunidad internacional" de desestabilizar República Democrática del Congo (RDC) al permitir a los responsables del genocidio a escapar al este del país y armarles.
Los críticos han acusado a Kagame por su autoritarismo y su censura a los medios de comunicación y sus restricciones a las libertades políticas. Además, Sudáfrica expulsó en marzo a tres enviados ruandeses por su presunta vinculación con el asesinato de varios opositores, si bien Kigali ha rechazado las acusaciones.
Por contra, Kagame ha recibido también alabanzas por parte de la comunidad internacional por el aumento del nivel de progreso en el país, que le han llevado a ocupar el segundo lugar en el continente, por detrás de Sudáfrica, según el informe 'Haciendo Negocios' del Banco Mundial para 2014.
