MADRID, 25 Feb. (EUROPA PRESS) -
El ex líder serbo-bosnio Radovan Karadzic asegura que "está deseando" asistir a su juicio ante el Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoslavia (TPIY), cuya reanudación está prevista para el próximo 1 de marzo, pero advierte de que sólo acudirá a la sala si le dejan "participar", según el contenido de una entrevista concedida desde su celda en La Haya a la cadena Al Yazira.
Karadzic --acusado de once cargos de crímenes de guerra, crímenes contra la Humanidad y genocidio-- no compareció en el inicio del juicio, el pasado 26 de octubre, argumentando que no le había dado tiempo para prepararse su defensa. El líder serbo-bosnia quería defenderse a sí mismo, pero ante el temor a que emprendiese nuevas argucias para evadir a la justicia, el TPIY le nombró a finales del año pasado un abogado de oficio, el británico Richard Harvey, que le representará cuando se reanude el proceso.
"Estoy deseando asistir a mi juicio siempre que pueda participar en él", indicó Karadzic en una entrevista escrita que ha sido incluida en el transcurso del reportaje 'La vida secreta de Radovan Karadzic, emitido por Al Yazira este miércoles, y colgado en la web de la cadena panárabe. "No voy a ser una planta aguantando la tormenta y sin tener la oportunidad de participar activamente. Si eso sucediese, sería una vergüenza para mí y para el propio tribunal", agregó.
Doctor en Psiquiatría por la Universidad de Sarajevo, Karadzic fue arrestado en Belgrado el 21 de julio de 2008 después de 13 años a la fuga y bajo la falsa identidad del experto en medicina alternativa Dragan Dabic. Preguntado sobre su vida como fugitivo, el ex líder asegura en la entrevista con el periodista Rageh Omaar que "el doctor Dabic no hizo nada que Radovan Karadzic no hubiese hecho".
Karadzic, de 64 años, había preparado gran parte de su defensa en una presunta oferta de inmunidad que le presentó en 1996 el diplomático estadounidense Richard Holbrooke a cambio de su retirada de la política, un argumento que ya ha sido rechazado por el tribunal. Sin embargo, durante la entrevista con la cadena árabe insistió en la existencia de dicho acuerdo.
"Holbrooke, en representación de la comunidad internacional y del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, prometió que si renunciaba a mi posición como presidente de la República Srpska, no participaba en las siguientes elecciones y me retiraba de la vida pública, no sería juzgado en La Haya. Yo he cumplido todas mis promesas. Aún estoy esperando a que el señor Holbrooke cumpla las suyas", reiteró. Holbrooke siempre ha negado rotundamente la existencia de dicho acuerdo.
ACUSADO DE LA MAYOR MASACRE HUMANA DESDE EL NAZISMO
El sumario final contra Karadzic abarca 69 páginas de atrocidades que no conocen rival en la historia de Europa tras la Segunda Guerra Mundial. Entre ellas destaca la matanza de más de 8.000 civiles musulmanes en Srbrenica, perpetrada en julio de 1995 por las fuerzas serbobosnias bajo su mando y considerada la mayor masacre humana desde el Nazismo.
De igual modo, se le responsabiliza de orquestar ataques contra más de una docena de poblaciones bosniacas, asedio de Sarajevo incluido, en el marco de una campaña "destinada a aterrorizar y a desmoralizar a la población bosnio-musulmana y bosnio-croata", según dictaminó Naciones Unidas.
"FUE UNA GUERRA QUE NO QUERÍAMOS Y NO NECESITÁBAMOS"
Preguntado sobre su papel en la guerra de Bosnia, Karadzic asegura en el reportaje que tuvo "un desafortunado papel, en una desafortunada guerra y en un desafortunado país. Fue una guerra que no queríamos y que no necesitábamos. Fue una guerra entre ciudadanos serbios, ya que los bosnios musulmanes son serbios que se acogieron al Islam bajo la ocupación otomana. Nuestro interés no era ser enemigos".
"Nuestros enfrentamientos fueron trágicos para todos los bosnios y beneficiosos sólo para terceros países. Si Bosnia hubiese tenido otros líderes a comienzos de los noventa, la guerra podía haberse evitado", dijo.
Prácticamente todos los analistas dan por sentado que el doctor Karadzic terminará el resto de su vida entre rejas como presunto instigador principal de un conflicto que se cobró las vidas de 100.000 personas y que le hicieron valedor del sobrenombre 'La Bestia de Bosnia'.
