Karzai comparece después del atentado contra su vida para condenar a "los enemigos de Afganistán"

Actualizado: domingo, 27 abril 2008 12:25


KABUL, 27 Abr. (Reuters/EP) -

El presidente afgano, Hamid Karzai, condenó el atentado contra su vida perpetrado hoy como un acto "de terror y desorden" perpetrado por "los enemigos de Afganistán", en referencia a las milicias talibán que han asumido la responsabilidad del ataque realizado durante el desfile de celebración del 16 aniversario de la caída del régimen comunista en el país y que se ha cobrado la vida de cuatro personas --un civil y tres milicianos talibán-- y ha herido a otras once, según los talibán y el Ministerio de Defensa afgano.

En una declaración televisada, Karzai afirmó que "los enemigos de la seguridad y el progreso han intentado interrumpir la ceremonia, y causar desorden y terror", al tiempo que informó de que "las fuerzas militares rodearon a los atacantes rápidamente y arrestaron a algunos de ellos" en el ataque.

Según fuentes policiales y de Reuters, dos miembros del Parlamento afgano y cuatro civiles han resultado heridos por el ataque, cuya responsabilidad se han atribuido los talibán, a través de su portavoz Zabihulá Mujahid, que explicó que al menos tres de sus milicianos habían muerto en el asalto, y que otros tres lograron huir tras perpetrar el ataque "con armas ligeras y granadas autopropulsadas".

En el acto también se encontraba presente el comandante de la Fuerza Internacional de Asistencia para Afganistán (ISAF), el general estadounidense Dan McNeill, así como el embajador británico Sir Sherard Cowper-Cowles, que explicó a grandes rasgos el incidente, que tuvo lugar "al final de la salva de 21 disparos; entonces escuché una explosión y vi una nube de humo a la izquierda del desfile, y luego escuché el sonido de disparos en todas direcciones", explicó el diplomático. "Tras ciertos momentos de duda, mi guardaespaldas me sacó en cuclillas", añadió.

A la ceremonia asistían también varios ministros del Gobierno afgano, que se vieron obligados a ocultarse del ataque antes de abandonar la zona protegidos por los servicios de seguridad, junto con Karzai y el general McNeill. El asalto podría haber tenido lugar desde un edificio situado a unos pocos metros de distancia del evento, según testigos.

En los momentos posteriores al ataque, los soldados participantes en la ceremonia se pusieron a cubierto mientras las tropas armadas y los guardaespaldas personales del presidente Karzai devolvían el fuego desde posiciones a cubierto.

El presidente afgano ha sobrevivido a varios intentos de asesinato desde su llegada al poder tras la caída del régimen talibán en 2001, y su actitud moderada pero firme se ha visto minada por las críticas a su Gobierno por los altos índices de corrupción. Karzai ha ofrecido repetidas propuestas de negociación a los guerrilleros, quienes no obstante han rechazado estas iniciativas y han prometido derrocar al presidente y expulsar a los más de 50.000 soldados internacionales presentes en la zona.