LONDRES, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Kenia, Mwai Kibaki, y el primer ministro, Raila Odinga, iniciaron hoy una gira de tres días por la región del Valle del Rift para preparar el plan de realojamiento de las decenas de miles de desplazados internos que tuvieron que huir de sus hogares cuando comenzó la violencia étnica el pasado enero.
En este viaje, Kibaki y Odinga observarán sobre el terreno las pésimas condiciones en que están viviendo estas personas, que se alojaron como pudieron en campamentos de refugiados, comisarías y colegios, entre otros lugares.
En estas zonas ya han comenzado a aflorar brotes de enfermedades típicas de la falta de higiene y buena alimentación, como la diarrea y la malaria, según informan la BBC y el diario local 'Daily Nation'.
Kibaki y Odinga comenzarán la gira en la ciudad de Eldoret, escenario de los peores sucesos violentos durante los dos meses de crisis política, incluida la quema de una iglesia en la que se habían refugiado decenas de civiles, la mayoría mujeres y niños.
Debido a las consecuencias de los enfrentamientos étnicos que fueron resultado de la lucha por el poder político, el realojamiento de los desplazados no va a ser nada fácil. Algunos de ellos no están dispuestos a volver a sus antiguos barrios hasta que desaparezcan las raíces del conflicto.
Muchos kenianos creen que las disputas por la distribución de la tierra, que beneficiaba a unas etnias en detrimento de otras, fueron las verdaderas causas de la violencia en el Valle del Rift. Por ello, algunos diputados han aconsejado que no se repartan las tierras con demasiada prisa y que antes se resuelvan cuestiones esenciales como la propiedad.
Para el primer ministro, el realojamiento de las familias desplazados internos va a ser la prioridad del nuevo gobierno, formado hace más de una semana por los dos antiguos rivales políticos.
Pero el ministro de Agricultura, William Ruto, destacó otro problema surgido tras la violencia postelectoral, los detenidos. Según afirmó, los líderes tribales del Valle del Rift no se oponen al realojamiento de los desplazados, pero explicó que la comunidad quiere que las personas que fueron detenidos en relación con los enfrentamientos sean juzgados o puestos en libertad si no hay pruebas contra ello.
