MADRID, 21 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Kosovo ha anunciado este miércoles su decisión de elevar los aranceles a los bienes importados desde Serbia y Bosnia y Herzegovina desde el diez al cien por cien, según ha informado el portal local de noticias Kosovapress.
La decisión implica además que las autoridades fronterizas impidan la entrada de cualquier bien que no haga referencia a Kosovo por el nombre contemplado en la Constitución, República de Kosovo, no reconocido ni por Belgrado ni por Sarajevo.
La decisión ha llegado en respuesta al fracaso de Kosovo a la hora de entrar en Interpol, que las autoridades han achacado a una campaña llevada a cabo por Serbia. Por ello, han acusado a Belgrado de estar en contra de normalizar sus relaciones. Bosnia y Herzegovina también voto en contra de la adhesión de Kosovo al organismo.
"Esto detendrá cualquier comercio entre Serbia y Kosovo", ha advertido el ministro de Comercio de Serbia, Rasim Ljajic, antes de que el presidente serbio, Aleksandar Vucic, convocara una reunión del Consejo de Seguridad Nacional para revisar la situación.
Por su parte, el ministro de Comercio Exterior y Relaciones Económicas de Bosnia y Herzegovina, Mirko Sarovic, ha lamentado que la decisión "supone el mayor golpe a la zona de libre comercio regional", tal y como ha recogido la agencia británica de noticias Reuters.
Bosnia y Herzegovina, Serbia y Kosovo forman parte del Acuerdo Centroeuropeo de Libre Cambio junto a Albania, Macedonia, Moldavia y Montenegro. La pertenencia al CEFTA es incompatible con la pertenencia a la Unión Europea (UE), por lo que varios antiguos miembros lo han abandonado tras entrar a formar parte de la unión.
"CLARA VIOLACIÓN" DEL CEFTA
La Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la Unión Europea, Federica Mogherini, ha denunciado la decisión de Kosovo, que ha tildado de "clara violación" del CEFTA y del "espíritu del Acuerdo de Estabilización y Asociación entre la UE y Kosovo".
"Exacerba aún más la situación tras la imposición inicial de un incremento del diez por ciento la semana pasada. El Gobierno de Kosovo tiene que revocar de forma inmediata estas decisiones", ha remachado.
La UE instó la semana pasada al Gobierno kosovar a dar marcha atrás en su polémica decisión de aplicar un arancel del 10 por ciento a los productos serbios, que perjudicó el diálogo con Belgrado mediado por la UE para avanzar en la normalización de sus relaciones.
Mogherini ya dejó claro entonces que ambas partes deben "garantizar un entorno que favorezca el diálogo" y abstenerse de "retórica, acciones y medidas que son contrarias al espíritu de la normalización" y cumplir "rápidamente" sus compromisos en el marco del diálogo dado el nexo "directo" entre su normalización y "las perspectivas concretas para sus aspiraciones en la UE".
