Moratinos pide no abrir de nuevo la "caja de Pandora de los Balcanes"
BRUSELAS, 23 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los ministros de Asuntos Exteriores de los Veintisiete respaldaron hoy volver a las negociaciones bilaterales entre Belgrado y Prístina sobre el estatuto futuro de Kosovo para evitar la independencia unilateral de esta provincia serbia de mayoría albanesa administrada por la ONU desde la guerra de 1999 y la consiguiente división que provocaría entre los Estados miembros de la Unión Europea.
El Alto Representante de la Unión Europea para la Política Exterior y de Seguridad Común, Javier Solana, lamentó el "fracaso" de las negociaciones en el Consejo de Seguridad de la ONU sobre la resolución sobre Kosovo por el veto de Rusia y defendió la vuelta a la negociación entre las partes, que a su juicio debería empezar en agosto y durar un plazo aproximado de 120 días.
Indicó que las negociaciones estarán dirigidas, casi con toda seguridad y a falta del visto bueno del secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, por una "troika" formada por la UE, EEUU y Rusia, que ha aceptado participar, y anunció que en los próximos días designará al representante de los Veintisiete en este diálogo.
"Los Estados miembros, todos, van a estar juntos para encontrar una solución que contribuye a estabilidad y prosperidad de Balcanes", señaló Solana, que dijo que nadie se plantea una independencia unilateral de Kosovo.
Por su parte, el comisario de Ampliación, Olli Rehn, afirmó que estas negociaciones constituyen el "intento final" de resolver el estatuto de Kosovo de forma dialogada, por lo que pidió a Prístina y a Belgrado "que hagan un esfuerzo serio para tener una posición constructiva y realista en estas negociaciones". "Es mejor resolver esto mediante un proceso ordenado y controlado en el marco multilateral que con declaraciones unilaterales o amenazas de veto unilaterales", recalcó el comisario.
En todo caso, Rehn insistió que el plan presentado por el enviado especial de la ONU, Martti Ahtisaari, que contempla una independencia tutelada para Kosovo, debe seguir siendo la "base del proceso" porque es "justa y equilibrada" y da "la mejor solución" para garantizar la estabilidad no sólo en Kosovo sino en toda la región de los Balcanes.
El ministro portugués de Asuntos Exteriores y presidente de turno de la UE, Luis Amado, admitió que hay "diferentes sensibilidades" entre los Estados miembros sobre Kosovo "pero hay también determinación de mantener la unidad de la UE en este proceso".
"CAJA DE PANDORA"
Por su parte, el jefe de la diplomacia española, Miguel Ángel Moratinos, coincidió también en que "el objetivo es mantener la unidad de la UE". "Todo el mundo lo que quiere es que haya estabilidad paz y que no abramos de nuevo la caja de Pandora en los Balcanes, por lo tanto hay que seguir trabajando con el compromiso de encontrar una solución definitiva", recalcó.
Subrayó que las negociaciones entre Belgrado y Prístina "tienen que ser genuinas, serias, abiertas, creativas, innovadores y todo tipo de propuestas que se puedan llevar". "No hay que excluir nada y hay que agotar toda capacidad de diálogo y negociación. Hay cuatro meses y estos cuatro meses hay que ponerlos para que los esfuerzos diplomáticos puedan alcanzar una solución", indicó.
"Hay que evitar la declaración de independencia unilateral. Del multilateralismo fracasado de Naciones Unidas no hay que pasar a un unilateralismo. Hay que seguir negociando para volver al multilateralismo", concluyó.
También el ministro francés de Asuntos Exteriores, Bernard Kouchner, indicó que es necesario evitar una declaración unilateral de independencia por parte de Kosovo porque a su juicio "no servirá para crear una legitimidad o garantizar el apoyo" incluso aunque algunos países la reconozcan. "Si no hay unidad de los 27 países de la UE no puede haber apoyo real. Para que Kosovo sea independiente necesita apoyo de la UE", enfatizó.
