BEIRUT, 20 Nov. (EP/AP) -
El primer minsitro libanés, Fuad Siniora, se enfrenta a manifestaciones callejears impulsadas por la micilia chií libanesa Hezbolá si no llega antes a un compromiso político, después de rechazar dimitir del Ejecutivo, con Hezbolá exigiendo un mayor peso dentro del Gobierno, después de que la semana pasada cinco ministros, dos de Hezbolá y afiliados del partido chií Amal dimitieran del Gobierno libanés.
En este sentido, el líder de Hezbolá, el jeque Hassan Nasralá, urgió a sus seguidores a manifestarse en masa, de forma no violenta, hasta conseguir la dimisión del primer ministro si éste ignora las exigencias de la milica chií libanesa de formar un Gobierno de unidad nacional en el que Hezbolá y sus aliados aumenten su influencia en la toma de decisiones con el objetivo de alcanzar de facto el poder de veto.
A pesar de que Nasralá no dio fechas concretas, el diario independiente 'An Nahar' aseguró hoy que los próximos tres días son fundamentales para que los negociadores de todas las formaciones políticas lleguen a un acuerdo que deje fuera de las calles el enfrentamiento político.
Después de que Nasralá arremetiera ayer contra la Administración estadounidense y tachara al actual Gobierno libanés de títere del Ejecutivo de Washington "ilegítimo e inconstitucional", un diputado de Hezbolá confirmó hoy las amenazas de Nasralá de tomar las calles de Beirut e insistió "si no hay Gobierno de unidad nacional o elecciones anticipadas, habrá un movimiento político y popular en las calles para derrocar al Gobierno", aseguró el diputado Hussein Haj Hassan a Associated Press, aunque rechazó pronunciarse sobre la fecha inicial de las protestas.
