BEIRUT, 19 Dic. (EP/AP) -
Un hombre de 35 años murió hoy en el sur de Líbano por la explosión de una bomba de racimo procedente de la guerra del verano de 2006 entre Israel y Hezbolá, según informó la Agencia de Noticias Nacional libanesa.
La bomba detonó cuando Mohammad Hamzeh estaba recogiendo leña en la localidad de Zibqine, cerca de la ciudad portuaria de Tiro. Según la agencia, Hamzeh murió inmediatamente.
Más de 30 personas han muerto a causa de la explosión de bombas de racimo y minas terrestres en Líbano desde que ocurrió el conflicto. Tanto la ONU como organizaciones de defensa de los Derechos Humanos han acusado a Israel de dejar caer unos cuatro millones de submuniciones de las bombas de racimo durante la guerra. Hasta un millón continúan sin detonar, por lo que suponen un gran riesgo para la vida de los civiles.
Cuando las bombas de racimo, que parecen botes de gran tamaño, son lanzadas, se abren en el aire y expulsan cientos de submuniciones, que caen a tierra, a menudo cubriendo amplias zonas. Algunas no explotan al impactar contra el suelo y detonan más tarde, al ser movidas.
