BEIRUT, 11 Jun. (EP/AP) -
Un responsable militar libanés aseguró hoy que el Ejército continuará extendiendo su ofensiva tanto dentro como fuera del campamento de refugiados palestinos de Nahr el Bared, en el norte del país, con el objetivo de tensar las cuerdas a los milicianos de Al Fatá al Islam.
"La batalla continuará hasta que los hombres armados se rindan y su responsabilidad por las muertes de soldados libaneses sea puesta ante la Justicia", señaló el militar, bajo anonimato, en declaraciones a la agencia AP.
Según destacó esta tarde, las tropas habían hecho avances significativos y serían capaces de destruir a la resistencia y el cuartel general del líder de Al Fatá al Islam, Shaker Youssef al Absi.
Asimismo, dijo que el Ejército había encontrado "importantes documentos" de la milicia, y que las tropas habían repelido un intento de infiltración por parte de milicianos, matando a siete de ellos. Esta información no ha podido ser verificada oficialmente.
Por otro lado, un soldado libanés murió en los enfrentamientos registrados hoy, incrementando el número de militares fallecidos en Nahr el Bared a 58 desde que comenzaron los combates el pasado 20 de mayo, según fuentes oficiales.
Además, dos trabajadores libaneses de Cruz Roja murieron y un tercero resultó herido por disparos realizados desde el interior del campamento de Nahr el Bared. En un incidente distinto, resultó herido un mediador del conflicto, el jeque Mohamed Haj Ali.
Fuentes de las fuerzas de seguridad informaron de que los trabajadores, identificados como Boulos Maamari y Haitham Suleiman por la agencia estatal libanesa National News Agency, murieron cuando su vehículo recibió el impacto de un proyectil de mortero disparado desde el interior de Nahr el Bared por milicianos de Al Fatá al Islam. Un tercer trabajador de Cruz Roja resultó herido de gravedad.
