BEIRUT, 26 Nov. (EP/AP) -
El subsecretario de la organización chií de Hezbolá, el jeque Naim Kassem, prometió el domingo continuar las protestas callejeras y otros medios pacíficos para derrocar al Gobierno libanés, pero advirtió de que el grupo no anunciará de antemano sus planes.
"No existe un calendario específico ni planes finales. Hay muchas ideas que utilizaremos conforme lo consideremos conveniente para lograr nuestros objetivos", dijo , subsecretario general de Hezbolá, al canal de televisión Al-Manar, que pertenece al grupo.
El jeque realizó estos comentarios días después que el Gobierno aprobara la creación de un tribunal internacional para juzgar a los sospechosos en el asesinato del ex primer ministro libanés Rafik Hariri, pese a las objeciones de Hezbolá y del presidente prosirio Emile Lahoud.
Seis ministros partidarios de Hezbolá dimitieron a principios de mes tras fracasar las negociaciones con el gobierno para dar al grupo guerrillero y sus aliados una mayor representación en el gabinete.
Hezbolá advirtió de que el grupo organizará manifestaciones callejeras para derrocar al gobierno. Las protestas fueron postergadas tras el asesinato del martes del ministro de Industria Pierre Gemayel, un líder cristiano antisirio. Kassem reiteró su amenaza el domingo pero prometió mantener confidencial el momento exacto del inicio de de las mismas.
"Ello lo hará más efectivo y facilitará una mayor cordura que esperamos muestre la otra parte antes de que lleguemos a un callejón sin salida", señaló.
Kassem pidió al primer ministro Fuad Saniora que dimita, por considerar que reunirse ahora con el Gobierno "carece de sentido y es anticonstitucional" tras haber dimitido seis ministros.
