Líbano.- La UNESCO advierte de que tres lugares de la lista de patrimonio mundial en Líbano necesitan reparación urgente

Actualizado: lunes, 18 septiembre 2006 23:04

PARÍS, 18 Sep. (EP/AP) -

Tres lugares del Líbano incluidos en la lista del patrimonio mundial de UNESCO --que contienen algunas de las ruinas más significativas en Oriente Próximo-- tienen urgente necesidad de reparaciones después la reciente guerra entre Israel y Hezbolá, informó hoy la agencia de la ONU.

En un caso, los frescos en una tumba de la era romana en Tiro cayeron al suelo cuando un edificio a 150 metros de distancia fue bombardeado, explicaron expertos de la ONU que visitaron Líbano e informaron sobre sus conclusiones. Algunas de las pinturas fueron destruidas.

Mientras, en la antigua ciudad fenicia de Biblos las ruinas se vieron gravemente dañadas por un vertido de petróleo, y en Baalbek, otra ciudad fenicia que incluye algunos de los ejemplos más finos de la arquitectura imperial romana las ruinas pueden haber padecido daños estructurales, agregaron.

"Aunque no fue impactada directamente ni sufrió ningún daño visible importante, las grietas en la piedra probablemente se ensancharon por la conmoción causada por bombardeos cercanos", precisó Mounir Bouchenaki, que condujo la misión.

Bouchenaki agregó que hacen falta nuevas investigaciones con tecnología fotográfica moderna para determinar la medida de los daños sufridos por la colosales estructuras de Baalbek.

Biblos padeció un vertido petrolero masivo causado por el bombardeo de una planta de energía a mediados de julio, que fue caracterizado como el peor desastre ecológico de Líbano.

Líbano tiene seis lugares incluidos en la lista del patrimonio de la humanidad. Los otros tres son la ciudad de Anjar, el Valle Sagrado y el Bosque de los Cedros de los Dioses.

Françoise Riviere, directora general asistente de la rama cultural de UNESCO, dijo que reparar los tesoros históricos podría redundar en beneficios psicológicos para un país orgulloso de su historia. "Queremos usar la cultura para curar las heridas del trauma padecido, especialmente por los niños del sur de Líbano que sobrevivieron a la guerra", agregó. "Es algo que experimentamos después del maremoto en Indonesia: la cultura puede dar sentido a quienes lo perdieron todo", agregó.