MONROVIA, 6 Dic. (EP/AP) -
Una delegación de la Comisión para la Reconciliación y la Verdad en Liberia ha visitado las fosas comunes donde se encuentran los restos mortales de miles de civiles masacrados durante la Guerra Civil que asoló el país africano durante 14 años, enfrente de las que prometieron a los residentes de las localidades donde se encuentran los enterramientos que harían todo lo posible para dar sepultura decente a los cadáveres de sus familiares y amigos.
Según el presidente del grupo, Jerome Verdier, la delegación visitó cuatro localidades en al condado de Lofa, una de las zonas más afectadas por el conflicto, por su excedente de cereales, lo que provocó que cambiara de manos de facciones rivales en repetidas ocasiones a lo largo de la guerra.
"En estos lugares, algunos de los supervivientes narraron horribles y sangrientas historias sobre las atrocidades cometidas por las facciones en guerra conflicto de Liberia, y que provocaron lágrimas entre algunos de los asistentes", según declaró la Comisión en una nota.
Se cree que la fosa común más pequeña alberga 78 cuerpos en su interior, pero las más grandes contienen hasta 500 cuerpos, según Verdier. El presidente de la Comisión declaró, no obstante que "los liberianos están preparados para contar la verdad sobre lo ocurrido, y están dispuestos a dejar el pasado atrás".
"Las fosas comunes que hemos visto son aquellas con las que tiene que vivir la población. En algunos lugares, incluso, están grabados los nombres de las víctimas que fueron enterradas allí", añadió.
Verdier declaró que es el deseo de los residentes exhumar y enterrar de nuevo los cuerpos, y a pesar de que reconoció que ese no era el papel que la Comisión debe desempeñar, prometió hacer todo lo posible para ver cumplida esa petición. Los largos años de conflicto han dejado al país en la bancarrota y han provocado que la recuperación de los cadáveres sea una tarea demasiado costosa.
La Comisión para la Reconciliación y la Verdad carece de competencia para estos asuntos, así como para llevar a los criminales de guerra a juicio, aunque puede recomendar que algunos de ellos sean puestos en manos de las autoridades.
Pocos residentes de este país del oeste de África han escapado indemnes del conflicto. Se cree que cerca de un cuarto de millón de liberianos murieron en el largo enfrentamiento iniciado en 1979 entre rebeldes y el Gobierno de Charles Taylor, ahora en el exilio.
