El líder de las milicias 'anti balaka' solicita un diálogo de paz

Actualizado: miércoles, 2 abril 2014 8:09

MADRID, 2 Abr. (EUROPA PRESS) -

   El líder de las milicias cristianas 'anti balaka' de República Centroafricana (RCA), Patrice Ngaissona, ha solicitado este martes el Gobierno la apertura de un diálogo para poner fin a los enfrentamientos y ha recalcado que, sin las negociaciones, "la paz no será posible".

   "Los 'anti balaka' controlan casi todo el país. Este movimiento pide al Gobierno un acto de valentía y tiende la mano al diálogo. Esperamos que el Gobierno haga un gesto para empezar a dialogar y poner fin definitivamente a las hostilidades", ha dicho.

   En una entrevista concedida a la emisora Radio France Internationale (RFI), Ngaissona ha recalcado que "la paz no tiene precio" y ha reiterado que su movimiento "seguirá tendiendo la mano al Gobierno para dialogar".

   Asimismo, ha asegurado controlar la totalidad del movimiento y ha subrayado que, en caso de dar la orden para que se ponga fin a las hostilidades, ésta será obedecida por todos sus milicianos.

   Ngaissona ha indicado que el proceso de reconciliación "está en manos de los 'anti balaka' y del Gobierno", el tiempo que ha recalcado que "si se quiere la paz, todas las fuerzas deben participar (en el proceso), incluyendo a los antiguos rebeldes de Séléka, el Gobierno, los 'anti balaka' y las fuerzas internacionales".

   En este sentido, ha exigido "la salida del país de todos los mercenarios", entre los que ha destacado a miembros de la secta islamista nigeriana Boko Haram, y el reconocimiento de sus milicias como "un movimiento de emancipación popular".

   Por último, ha negado tener lazos con el expresidente François Bozizé, derrocado por la guerrilla musulmana Séléka, y ha manifestado que "un poder es un poder, y ese  --en referencia al mandato de Bozizé-- ya terminó".

   El lunes, el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, expresó su inquietud por el empeoramiento de la situación de seguridad y la escalada de violencia en el país, al tiempo que rechazó firmemente los actos de violencia contra los civiles y las tropas internacionales desplegadas en el país.

BALANCE DE LA VIOLENCIA

   La ONU ha cifrado en miles el número de muertos y en 2,2 millones --alrededor de la mitad de la población-- el número de personas que necesitan ayuda humanitaria desde el inicio en diciembre de 2012 del conflicto tras el levantamiento armado de la guerrilla Séléka, formada principalmente por musulmanes.

   Además, más de 650.000 personas son desplazados internos, mientras que más de 290.000 han huido a los países vecinos buscando refugiarse lejos del conflicto, que ha tomado un cariz crecientemente sectario con la toma de las armas por parte de las milicias cristianas.

   Como consecuencia de ello, alrededor de 15.000 musulmanes se encuentran atrapados en la capital, Bangui, y otros puntos del norte, el noroeste y el sur del país, protegidos por las fuerzas internacionales, pero en una situación aún así peligrosa.

   "Los 'anti balaka', que surgieron como una reacción a las actitudes depredadoras de Séléka, se están metamorfoseando en bandas criminales que, además de seguir persiguiendo a los musulmanes, están comenzando a atacar a otros cristianos y no musulmanes", advirtió la semana pasada la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay.

   En sus declaraciones, Pillay elertó de la existencia de casos de decapitaciones de niños, violaciones y actos de canibalismo en el marco del conflicto desatado en RCA, antes de subrayar que "el odio intercomunitario sigue a un nivel aterrador" en el país.

   "RCA se ha convertido en un país en el que la gente no es sólo asesinada, es torturada, mutilada, quemada y desmembrada, en ocasiones por turbas espontáneas, así como por grupos organizados de combatientes armados", manifestó.

Leer más acerca de: