CIUDAD DE MÉXICO, 3 Jul. (Reuters/EP) -
El presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador, ha anunciado este lunes que celebrará un referéndum revocatorio a mediados de su mandato de seis años, dentro de tres años.
"Es un compromiso que voy a cumplir: me voy a someter a una revocación del mandato cada tres años para que los ciudadanos decidan si quieren que continúe el presidente", ha señalado López Obrador en una entrevista para la cadena TV Azteca.
"Así como me están eligiendo, me pueden quitar. Estoy seguro de que voy a ganar esa consulta porque van a haber resultados", ha aseverado.
De acuerdo con los resultados provisionales del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP), López Obrador ha ganado con el 53,9 por ciento de los votos, mientras que Ricardo Anaya, del Partido Acción Nacional (PAN), y José Antonio Meade, del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI), han conseguido un 22,4 y un 16,4 por ciento de las papeletas.
Los sondeos sobre intención de voto pronosticaban desde hacía casi un año una holgada victoria de López Obrador. El próximo 1 de diciembre, cuando dé el relevo a Enrique Peña Nieto en Los Pinos, se convertirá en el primer presidente de izquierda que tiene México desde hace décadas.
López Obrador ha prometido cumplir su "responsabilidad histórica" con "humildad". "El poder solo tiene sentido cuando se pone al servicio de los demás", sostuvo. "A pesar de que tengamos mayoría en el Congreso, no vamos a llevar a cabo ninguna acción contraria al interés general", aseguró.
Huirá también de "la parafernalia del poder" y en este sentido ha insistido en que venderá el avión presidencial, valorado en 7.500 millones de pesos (320 millones de euros), los helicópteros del Gobierno federal serán transformados en ambulancias y los servidores públicos tendrán prohibido trasladarse en aviones o helicópteros privados.
El presidente electo se ha mostrado consciente de que su 'hoja de ruta' requerirá sacrificios porque prevé destinar importantes recursos a políticas sociales. Aclaró que va a ser "muy riguroso" con el gasto público: "Nos vamos a apretar el cinturón. Estoy dispuesto a dar hasta la camisa para que podamos impulsar el desarrollo".
