Más de 2.300 soldados de EEUU y 30.000 civiles han perdido la vida en tres años de guerra en Irak

Actualizado: domingo, 19 marzo 2006 15:52


MADRID, 19 Mar. (EUROPA PRESS) -

La invasión de Irak lanzada por Estados Unidos y Reino Unido cumplirá mañana su tercer aniversario dejando detrás dramáticas cifras de víctimas: más de 2.600 soldados estadounidenses, 103 británicos, 104 de otros países que participaron en algún momento en la coalición, y una cantidad de víctimas civiles imposible de estimar con exactitud y que organizaciones independientes estiman entre 33.000 y 38.000.

Según la web 'Iraq Coalition Casualty Count', desde el 20 de marzo de 2003 han muerto en Irak 2.318 soldados estadounidenses --la muerte de los seis últimos aún está pendiente de confirmación por el Pentágono--, 103 británicos y 104 de otros países, entre ellos 11 españoles.

Otra organización, 'Iraq Body Count', estima que las víctimas civiles de la guerra son entre 33.679 y 37.975. Ello se explica porque las cifras proceden de un sondeo amplio de las informaciones de los medios de comunicación online y, cuando las cifras son diferentes según las fuentes, se incorpora al cómputo no un número, sino una horquilla.

Según cifras hechas públicas hoy, actualizadas con los datos de la morgue de Bagdad para 2005, el número de víctimas civiles no ha hecho más que aumentar desde el 1 de mayo de 2003, fecha en que el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, anunció el fin de las principales operaciones militares.

Desde el 1 de mayo de 2003 hasta el 19 de marzo de 2004 murieron 6.331 personas; desde el 20 marzo de 2004 hasta el 19 de marzo de 2005 murieron 11.312 civiles y, desde el 20 de marzo de 2005 hasta el 1 de marzo de 2006 murieron 12.617 civiles, lo que hace del último año el más sangriento desde que comenzó la guerra.

De hecho, según estas cifras, el número de muertos pasó de 20 diarios en el primer año de la posguerra oficial, a 31 en el segundo y 36 en el tercero. Las cifras tienen en cuenta no sólo los muertos en ataques, sino también las de la criminalidad derivada de la mayor inseguridad. No incluyen, precisa la organización en su web, las víctimas de la llamada 'guerra de las mezquitas' tras el atentado que destrozó la Mezquita Dorada de Samarra el 22 de febrero.

13 ESPAÑOLES MURIERON

Entre las víctimas se cuentan también 86 periodistas y técnicos de medios de comunicación, según un el balance de Reporteros sin Fronteras (RSF), de ellos dos españoles, el periodista de 'El Mundo' Julio Anguita Parrado y el cámara de Telecinco José Couso.

Durante los 14 meses que España formó parte de la coalición (entre marzo de 2003 y mayo de 2004), un total de 11 españoles perdieron la vida en Irak. El último fue el comandante de la Guardia Civil Gonzalo Pérez García, que el 22 de enero de 2004 resultó gravemente herido al recibir un disparo en la cabeza en el pueblo de Al Hamza, en Irak.

Quedó en estado de coma profundo e irreversible y murió días más tarde en el Hospital Central de la Defensa, en Madrid.

Antes de eso, el 29 de noviembre de 2003, siete agentes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) fueron asesinados en Latifiya (Irak) en una emboscada, en la que sobrevivió el agente José Manuel Sánchez Riera, cuando viajaban en dos vehículos todo terreno desde Bagdad a Diwaniya. En el ataque fallecieron Carlos Baró Ollero, José Lucas Egea, Alberto Martínez González, José Merino Olivera, José Carlos Rodríguez Pérez, Alfonso Vega Calvo y Luis Ignacio Zanón Tarazona.

Los siete tenían procedencia militar.

Otros tres militares españoles fallecieron en Irak entre agosto y octubre de 2003. El capitán de navío Manuel Martín Oar murió el pasado 20 de agosto a consecuencia de las heridas que sufrió en el atentado con coche bomba contra la sede general de la ONU en Bagdad.

El segundo militar fallecido en Irak fue el sargento del Ejército del Aire José Antonio Bernal, que fue asesinado el 9 de octubre de 2003 por un grupo de desconocidos que le dispararon a quemarropa a la entrada de su domicilio a las afueras de la capital iraquí.

La tercera víctima fue el sargento Luis Puga Gandar, que murió en Dawiniya (centro-sur de Irak) el 26 de octubre del mismo año cuando recibió un disparo accidental de un compañero en el momento en que éste preparaba su arma.