La mayoría demócrata promete investigar a fondo la legalidad del programa de escuchas secretas de la Casa Blanca

Actualizado: sábado, 25 noviembre 2006 16:21


WASHINGTON, 25 Nov. (EUROPA PRESS) -

La próxima presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, afirmó su voluntad de investigar el programa de escuchas secretas y su aplicación sobre el marco legal del Acta de Vigilancia de Inteligencia Exterior de 1978 (FISA), según informó un ayudante personal de la congresista al diario estadounidense 'The New York Times', ante la preocupación de diversos funcionarios de la Casa Blanca por la posibilidad de que la recientemente obtenida mayoría demócrata en el cuerpo legislativo pueda cancelar el programa de escuchas secretas aprobado por el presidente estadounidense.

El ayudante de Pelosi señaló que hasta el momento, la Casa Blanca sólo ha admitido llevar a cabo reuniones, de carácter limitado, para estudiar el programa. Sin embargo, reconoció que "hay un interés bipartidista en ver si lo que dice la Casa Blanca se atiene o no a lo que especifica la FISA", y explicó que "estamos legislando sobre un tema cuyos parámetros no terminamos de entender".

Si bien la ley promulgada hace casi tres décadas permite emplear dispositivos de escucha mediante orden judicial, el llamado Programa de Vigilancia Terrorista permite la aplicación de técnicas de vigilancia sin dicho procedimiento, siempre y cuando los objetivos de la misma sean considerados sospechosos de estar relacionados con la organización terrorista al Qaeda o grupos similares.

Por su parte, los congresistas republicanos ven una oportunidad perdida para resolver las muchas preguntas suscitadas por el polémico programa, y que podrían haberse resuelto, según el senador Arlen Specter, "mucho antes", cuando conservaban la mayoría bicameral.

"A cada día que pasaba, existía una clara invasión de la privacidad que podría haber sido evitada", señaló Specter, en su día presidente del Comité encargado de investigar la aplicación legal del programa de escuchas secretas del presidente Bush.

El senador, uno de los más críticos con el programa, atacó la propuesta como una usurpación "inapropiada" de la autoridad presidencial "que no podía ser disculpada". Tras firmar junto con su colega demócrata Dianne Fierstein una propuesta de prohibición de dicho procedimiento, Specter se comprometió a presidir el comité encargado de juzgar la constitucionalidad de las escuchas secretas.

Hasta el momento, la falta de una resolución ha provocado confusión entre los agentes de inteligencia, que un año después de la presentación del programa, todavía siguen sin conocer cómo aplicarlo en su totalidad.

"Hay mucha incertidumbre en tordo a este programa", explicó al diario un oficial de inteligencia bajo el anonimato. "Hemos desperdiciado un año entero y hasta ahora no se ha hecho nada para averiguar cómo podemos resolver este proceso", lamentó.