Al menos 34 milicianos del Frente al Nusra, filial de Al Qaeda en Siria, han muerto este domingo en una ofensiva del Ejército sirio, que ha contado con el apoyo de milicianos del grupo chií libanés Hezbolá, en la provincia de Alepo, según ha informado el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos en un nuevo balance.
Las fuerzas progubernamentales atacaron la región de Al Malá y se hicieron con el control de la zona, según el Observatorio, una organización con sede en Londres pero con una amplia red de informantes dentro del país árabe. El objetivo del Ejército es cortar las vías de suministro para las milicias insurgentes de Alepo (norte).
También hay combates en la zona de Hendarat, igualmente en la provincia de Alepo, en los que ha muerto un miliciano de la Brigada Al Quds, una organización armada palestina aliada del régimen.
La agencia de noticias oficial, SANA, ha informado de "nuevos avances" del Ejército en el noreste de Alepo con la ayuda de grupos de defensa popular. "Un gran número de terroristas han sido eliminados", informa SANA, que cita fuentes militares.
Por otra parte, el Observatorio ha informado de al menos 13 muertos en enfrentamientos entre milicianos del Estado Islámico y otras organizaciones insurgentes en Ber Qsab, en el sureste de la provincia de Damasco, registrados en las últimas 24 horas.
