BANGKOK, 9 May. (Reuters/EP) -
Al menos cuatro manifestantes han recibido atención médica este viernes por la inhalación de gas lacrimógeno, según ha informado el centro médico Erawan, después de que la Policía tailandesa haya intentado dispersar a los cientos de manifestantes antigubernamentales que han intentado entrar en el Centro de Administración de la Paz y el Orden durante una protesta contra el Gobierno en funciones.
Los manifestantes quieren que el Ejecutivo dimita en bloque y que se aplacen los comicios y se inicie un programa de reformas para poner fin a lo que han bautizado como el "régimen de Thaksin", en referencia a Thaksin Shinawatra, el hermano mayor de la primera ministra que fue derrocado como primer ministro por un golpe de Estado en 2006 y, tras huir del país, fue condenado por corrupción en 2008.
El líder de los manifestantes antigubernamentales, el exviceprimer ministro Suthep Thaugsuban, ha hablado a las personas congregadas frente al Parlamento, las oficinas del primer ministro y cinco cadenas de televisión y les ha pedido que no se dejen manipular por el Gobierno.
"Barreremos los escombros del régimen de Thaksin de nuestro país", ha afirmado Suthep, que fue viceprimer ministro cuando gobernó el Partido Democrático.
Los manifestantes han salido a las calles con banderas de Tailandia y se han concentrado en su mayoría en el barrio histórico de Bangkok. "Esa marioneta de Yingluck se ha ido pero nuestro trabajo no ha terminado", ha dicho Pornprasert Chernalom, un manifestante de 39 años que regenta un pequeño negocio en la provincia de Samut Sakhon, al oeste de la capital tailandesa. "El Gobierno ilegítimo de Thaksin continúa en el poder. Nuestro siguiente paso es darle el poder al pueblo", ha asegurado.
Desde el inicio de las manifestaciones contra el Gobierno en noviembre de 2013, 25 personas han muerto en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad o como consecuencia de explosiones de granadas en manifestaciones.
CONDENA A YINGLUCK
El Tribunal Constitucional declaró el miércoles a la primera ministra, Yingluck Shinawatra, culpable de abuso de poder y le obligó a dimitir por un nombramiento irregular que realizó su Gobierno en 2011 para favorecer que un pariente suyo llegara a jefe de la Policía.
Un día después, la Comisión Nacional Anticorrupción ha imputado a Yingluck por negligencia por su sistema gubernamental de compra de arroz y ha remitido el caso al Senado para que decida si le inhabilita para ejercer cargos políticos durante cinco años.
A pesar de estas decisiones, el partido de Yingluck, el Pheu Thai, continúa al frente del Gobierno provisional y esperar organizar las elecciones generales del próximo 20 de julio, en las que podría volver a revalidar su mayoría.
Cientos de miles de 'camisas rojas', los partidarios de los hermanos Yingluck y Thaksin Shinawatra, se están dirigiendo a Bangkok para mostrar su rechazo al cese de Yingluck en una manifestación que recorrerá las calles de la capital el próximo domingo.
