Miles de bosnios vuelven a manifestarse para pedir la dimisión del Gobierno de la federación croata-musulmana

Actualizado: martes, 11 febrero 2014 19:14

SARAJEVO, 11 Feb. (Reuters/EP) -

Miles de bosnios han vuelto a salir este martes a las calles en varias ciudades, para pedir la dimisión del Gobierno de la federación croata-musulmana, en un nuevo día de protestas que han sacudido el país balcánico desde hace una semana por la corrupción y las altas tasas de desempleo.

El primer ministro de la Federación de Bosnia y Herzegovina, la entidad croata-musulmana de las dos que integran el país, ha rechazado las peticiones de los manifestantes, en el séptimo día de protestas que han incluido episodios violentos por el enfrentamiento con las autoridades.

Durante la última semana se ha puesto de manifiesto el creciente descontento de la sociedad bosnia respecto a la situación económica y política del país, además de provocar la dimisión de cuatro de los diez líderes cantonales que conforman el Gobierno de la Federación.

Sin embargo, los manifestantes piden la dimisión completa del Gobierno en favor de un Ejecutivo tecnócrata. "Han estado en el poder durante 20 años pero lo único que han hecho es volverse ricos y construir palacios y torres", ha afirmado uno de los manifestantes, Hasib Delic.

Pese a que Niksic ha rechazado las demandas de los manifestantes, ha remitido al Parlamento central las enmiendas a la ley electoral que tienen como objetivo permitir la celebración de elecciones anticipadas, una situación que en la actualidad no está incluida en la Constitución.

En Sarajevo, los manifestantes, en su mayoría pensionistas y desempleados de todas las edades, han recorrido la calle principal y han coreado cánticos en los que solicitaban dimisiones. Algunos de ellos portaban pancartas en las que se pedía ayuda a la Unión Europea.

Por su parte, los líderes bosnios y croatas han hecho un llamamiento a los ciudadanos para que las protestas no acaben en enfrentamientos étnicos, como el acontecido en la guerra civil de 1992-95 en la que murieron unas 100.000 personas.