Miliband y el 'número dos' laborista preparan el relevo de Brown en septiembre, según el 'Times'

Actualizado: martes, 29 julio 2008 22:54


LONDRES, 29 Jul. (EUROPA PRESS/Eva Martínez Millán) -

El ministro de Asuntos Exteriores británico, David Miliband, y la 'número dos' del Partido Laborista, Harriet Harman, se encuentran ya preparando el asalto al poder del primer ministro, Gordon Brown, con el objetivo de forzar su salida coincidiendo con el reinicio del curso político el próximo mes de septiembre, según informa el diario 'The Times' en su edición digital.

La operación confirmaría las especulaciones sobre movimientos internos auspiciados hace meses, pero precipitados a raíz de la pérdida del escaño de Glasgow Este, uno de los más seguros con los que contaba la formación, que encontraron sin embargo continuas réplicas por parte de los supuestos promotores en forma de comunicados oficiales en los que expresaban su apoyo a Brown como la "persona adecuada" para guiar al país en "tiempos difíciles".

No obstante, las declaraciones públicas de lealtad de Miliband, señalado como el mejor situado para recoger el testigo; Harman, al cargo durante las vacaciones del mandatario; y otros posibles sucesores tanto de la 'vieja guardia' --como el ministro de Justicia, Jack Straw--, como de las nuevas generaciones --como el titular de Pensiones, James Purnell--, se han visto atenuadas por la reiterada difusión de una estrategia encaminada a obligar a Brown a renunciar a fin de evitar que la severa desconfianza actual derive en 2010 en el mayor golpe al partido en la historia de las elecciones en Reino Unido.

Los tiempos estarían marcados para, ya a partir del 1 de septiembre, hacer entender al primer ministro la necesidad de retirarse con lo que los medios de Reino Unido denominan como una "muerte con dignidad". Sin embargo, en caso de que tras esa primera semana de plazo insista en continuar en Downing Street, su propio gabinete pasaría a una segunda fase en la que contraatacaría con una renuncia en cadena a la que se sumaría la presión de los sindicatos, colectivo crucial en el aparato del partido y uno de los pilares de su financiación.

OBJETIVO

El objetivo de esta operación es lograr el desalojo de la residencia oficial antes del trascendental congreso anual que el 20 de septiembre comienza en Manchester, que el partido pretende emplear no sólo para reconstruir un nuevo liderazgo, sino para marcar calendarios, ya que uno de los dilemas principales radica en la viabilidad de una legislatura con tres primeros ministros de los que sólo el primero pasó por la ratificación de las urnas.

No obstante, el dirigente escocés contaría con una estrategia paralela que pasaría por una remodelación de Gobierno para impulsar las políticas con las que aspira a recuperar electorado y, especialmente, castigar a quienes considera que lo han traicionado conspirando para provocar su jubilación política, que podría pasar, con todo, por un nombramiento internacional en el ámbito de la ayuda al desarrollo para mitigar con un cargo de prestigio, posiblemente ligado a la ONU, las consecuencias de su fracaso como primer ministro.

En este contexto, la información publicada por 'The Times' ya ha sido desmentida por algunos de los señalados, como Harman, quien reiteró su apoyo a Brown en un comunicado en el que negó haber dicho a sus asesores "éste es mi momento" cuando conoció la debacle laborista en las elecciones del jueves, las cuartas consecutivas que el mandatario pierde en el apenas un año transcurrido desde que tomó el testigo de Tony Blair.

Sin embargo, Harman se ha visto obligada a intervenir ya cuatro veces en los medios desde el pasado domingo, cuando los diarios aprovecharon sus ediciones especiales de fin de semana para revelar los planes de sucesión ya iniciados y de entre los que destaca la articulación de una candidatura en torno a David Miliband a la que se podría sumar como 'número dos' el veterano titular de Salud, Alan Johnson, para formar lo que la prensa ha dado en calificar el "billete para soñar".

SECTORES

Su materialización incluiría a otras figuras clásicas de la formación en la Cámara de los Lores, que habrían contactado ya con algunos de sus colegas para preparar el terreno ante el definitivo mes de septiembre en el que el sector de los 'blairistas' aspira a asestar a Brown la derrota que no lograron infringirle en la sucesión del anterior primer ministro.

Así, los propios protagonistas han dado pasos en esta dirección y mientras el titular de Exteriores fue visto en el Foro de Política Nacional de este fin de semana celebrado en Warwick con los influyentes dirigentes sindicales, Harman infundió a su discurso de la conferencia, cerrado a los medios, una clara vocación sucesoria según los presentes que desmentiría las posteriores declaraciones de apoyo, que también se vio obligado a realizar Jack Straw ante los rumores de que había encargado una recogida de firmas de aquellos dispuestos a sumarse a un motín.

El ministro de Justicia maneja una situación delicada puesto que debido a su veteranía y al consenso que genera en las distintas familias del partido --pese incluso a estar considerado como 'blairista'-- sería el responsable de transmitir a Brown el mensaje de que debe renunciar. No obstante, actualmente Straw se encuentra de vacaciones en Estados Unidos y hasta ahora se ha limitado a emitir un comunicado para negar las imputaciones de conspiración y expresar su confianza en el primer ministro, aunque figura también en el panel de posibles sucesores.

No obstante, según una fuente citada por 'The Times', la contienda por el liderazgo estaría entre Harman, con un amplio apoyo interno y el beneplácito de los sindicatos, y Miliband, considerado como el único perfil con el que cuenta el partido capaz de hacer frente al empuje del candidato conservador, David Cameron. Aún así, la firma de 45 diputados es suficiente para concurrir a una lucha por la sucesión y podría haber hasta seis aspirantes.