Actualizado: domingo, 24 enero 2010 11:59


JERUSALÉN, 24 Ene. (EUROPA PRESS) -

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el enviado estadounidense para Oriente Próximo, George Mitchell, han terminado su reunión de este domingo sin haber alcanzado ningún tipo de avance de cara a las negociaciones de paz entre palestinos e israelíes después de más de tres horas de encuentro en Jerusalén, según los negociadores.

Al término de la reunión, Netanyahu se limitó a expresar su deseo de que los palestinos "expresen un interés similar por las ideas del enviado estadounidense", y no concedió mayor importancia a la ceremonia que a la que tiene previsto acudir en Cisjordania, sede del Gobierno de la Autoridad Palestina, antes de la celebración de la festividad del Tu Bishvat.

"Es parte de nuestros esfuerzos para solidificar allí nuestra presencia", aseguró en comentarios recogidos por el diario 'Yedioth Aharonoth'.

Después, y ya ante los miembros de su Gabinete de Ministros, Netanyahu precisó que Mitchell mencionó "un número de ideas sobre como reactivar el proceso de paz".

"Le expresé nuestra esperanza de que tales ideas sirvan realmente para conducirnos a negociaciones, y le exprese nuestra esperanzade que los palestinos las reciban con el mismo interés, por el bien de todos aquellos que buscan la reconcilación en la región", añadió.

La agenda de Mitchell contempla visitas a Egipto y Jordania como parte de la serie de esfuerzos destinados a recabar apoyos en el mundo árabe para el proceso de paz. Su reunión del sábado con el ministro de Defensa israelí, Ehud Barak, subrayaba la importancia de este objetivo. "Un bloqueo en las negociaciones conducirá a otro episodio violento que beneficiará a Hamás", según declaró uno de los asesores del ministro israelí en referencia al grupo que actualmente controla la Franja de Gaza.

El negociador jefe de la OLP, Saeb Erekat, advirtió el viernes de que Israel está intentando imponer unas condiciones innegociables e imposibles de aceptar para los palestinos.

Según Erekat, Israel insiste en mantener control total sobre el valle del Jordán --un 28% de la superficie total de Cisjordania--, insiste en seguir sin conversar sobre el futuro estatus de Jerusalén y desea que el futuro palestino sea una entidad desmilitarizada. "Todos estos factores han hecho descarrilar el tren de la paz del presidente estadounidense Barack Obama", lamentó.