BELGRADO/KABUL, 24 Jul. (Reuters/EP) -
Un soldado croata ha muerto y otros dos han resultado heridos en un atentado suicida perpetrado este miércoles por los talibán contra un convoy militar a las afueras de la capital afgana, Kabul, según han informado las autoridades de ambos países.
El ministro de Defensa de Croacia, Damir Krsticevic, ha contado en una rueda de prensa desde Zagreb que los uniformados se dirigían al aeropuerto de Kabul cuando una moto conducida por un kamikaze se ha empotrado contra uno de los vehículos del convoy.
Defensa y la Presidencia croata han indicado en sendos comunicados que un soldado croata identificado como Josip Briski ha resultado gravemente herido en la explosión y finalmente ha muerto en un hospital militar gestionado por Estados Unidos en la base aérea de Bagram.
"El hombre recibió toda la asistencia médica en el hospital de Bagram pero murió por la gravedad de sus heridas", ha dicho el Ministerio. Es la primera víctima mortal de las fuerzas croatas en Afganistán desde el despliegue de la OTAN en 2003.
Krsticevic ha señalado que otros dos militares han resultado heridos en los brazos y en las piernas y, aunque están graves, también están estables. "Ha sido un ataque aislado y los demás miembros del contingente croata están bien", ha asegurado.
Los tres soldados forman parte de un contingente croata de 23 efectivos que está bajo el mando británico con la misión de entrenar y asesorar a la Policía afgana.
Desde Kabul, el portavoz de la Policía capitalina, Ferdous Faramarz, ha informado de que "una explosión ha alcanzado a un convoy de tropas extranjeras en la carretera de Kabul a Jalalabad" dejando tres víctimas. La OTAN también ha confirmado el ataque.
Las autoridades afganas han atribuido el ataque a los talibán, que lo han confirmado reivindicando la autoría. Este atentado se produce en medio de los preparativos para la octava ronda de conversaciones entre los insurgentes y Estados Unidos en Qatar con miras a reactivar el diálogo de paz. La principal demanda de los terroristas es la retirada de las tropas internacionales de Afganistán.
Unos 20.000 militares extranjeros, la mayoría estadounidenses, están desplegados en la nación centroasiática como parte de una misión dirigida por Estados Unidos y la OTAN para asesorar y entrenar a las fuerzas afganas. Algunos efectivos estadounidenses también llevan a cabo operaciones antiterroristas.
