LA HAYA/BOGOTÁ, 8 Jun. (EUROPA PRESS) -
Nicaragua presentó hoy una demanda ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya para que resuelva el contencioso que mantiene con Colombia por la titularidad del archipiélago caribeño de San Andrés que el país centroamericano reclama como propio.
Si La Haya admite a trámite la demanda sobre la propiedad de estas islas caribeñas y sus aguas, el contencioso podría prolongarse durante varios años en el citado alto tribunal.
Por parte nicaragüense, el abogado Alain Pellet señaló el Pacto de Bogotá, que designa a La Haya como la autoridad final para resolver la disputa entre estos países latinoamericanos. Sin embargo, Colombia afirma que no hay ningún asunto que resolver ya que San Andrés forma parte de su territorio desde que las islas ocupadas les fueron cedidas en 1928.
"Para instituir estos procedimientos, Nicaragua está tratando de reabrir el asunto que se prolonga ya en el tiempo", según Pellet que alegó que este problema no era jurisdiccional como para solicitar a La Haya que regule el caso.
Nicaragua reclama que el archipiélago caribeño le pertenece porque fue cedido inadecuadamente a Colombia por el tratado de 1928, un periodo en el que el país estaba bajo la ocupación de Estados Unidos.
El país se vio "forzado a llegar a un acuerdo el cual les dio la posesión de la costa de los Mosquitos, que ya tenían anteriormente y como contraprestación el archipiélago de San Andrés, que le sirvió como reconciliación entre los Estados Unidos y Colombia", dijo Pellet.
Las islas tienen una extensión de 775 kilómetros y se encuentran al noroeste de Colombia, a unos 220 kilómetros de las costas de Nicaragua.
En 2003, Nicaragua invitó a varias compañías petroleras a realizar prospecciones en aguas cercanas al archipiélago lo que desató la ira de las autoridades colombianas, que pensaron que esas consultas podrían haber sido realizadas en su jurisdicción.
RESPUESTA COLOMBIANA
La postura de Colombia sobre el contencioso de San Andrés es constante desde hace años. Hoy mismo se inició la primera ronda de intervenciones de Nicaragua en las audiencias públicas sobre excepciones preliminares en el caso presentado ante la citada Corte Internacional de Justicia.
El ministro de Asuntos Exteriores colombiano, Fernando Araújo emitió hoy un comunicado oficial en el que sostiene que la posición de Nicaragua "carece de un sólido sustento histórico y legal y va en contravía de importantes principios y normas del Derecho Internacional. En particular Nicaragua insiste en desconocer el Tratado Esguerra-Barcenas de 1928/1930, el cual fue validamente firmado, aprobado, ratificado y registrado por los dos países".
"Al sostener dicha posición Nicaragua juega con fuego, dado que menoscaba las bases de su soberanía sobre una parte de su territorio", consideró.
Asimismo indicó que el gobierno nicaragüense ha tratado de hacer creer que la posición colombiana tiene "falta de firmeza y consistencia". Eso es resultado de su "disposición para buscar, mediante el diálogo, la solución de ordinarios incidentes fronterizos", añadió.
"Como la misma Nicaragua lo ha sostenido en su Memoria: 'Colombia ha rechazado cualquier diálogo sobre este asunto y simplemente ha mantenido y reforzado patrullajes navales y la captura de cualquier embarcación de bandera nicaragüense que pesque o intente explotar o explorar cualquier recurso al Este del Meridiano 82'. Nada puede ser más claro para demostrar la inexistencia de negociaciones entre los dos países sobre la naturaleza del Meridiano 82. La posición del Gobierno Nacional sobre este tema ha sido inequívoca, clara y coherente, y se ha mantenido invariable a lo largo de los años", explicó Perdomo.
"Colombia no caerá en el error de referirse a estas cuestiones de fondo y se limitará en la segunda ronda de intervenciones el día de mañana, a los asuntos relacionados con la competencia de la Corte", concluyó el ministro de Exteriores.
