MADRID, 11 Feb. (EUROPA PRESS) -
La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, ha anunciado este jueves que las primeras dosis de la vacuna llegarán al país la próxima semana y avanzado que las previsiones contemplan que se necesitará todo el años para inmunizar a toda la población.
Ardern ha explicado que parte de esas primeras dosis de Pfizer irán en un primer momento para 12.000 trabajadores fronterizos a partir del 20 de febrero, bajo un programa de vacunación que se prevé dure unas tres semanas.
"Este es un hito realmente importante, pero es solo uno de los muchos que tendremos durante este año", ha destacado.
Las fronteras han estado abiertas desde marzo de 2020 solo para residentes, ciudadanos neozelandeses y un reducido grupo de personas que cumplían un puñado de exenciones. "Esto nos da una capa adicional de seguridad para nuestros trabajadores de primera línea que hacen un trabajo increíble", ha reconocido Ardern.
"Va a llevar todo el año vacunar a todos", ha explicado Ardern, quien ha detallado tras los trabajadores fronterizos se les ofrecerá a sus contactos familiares ser los siguientes.
Ya en abril, los trabajadores sanitarios y el personal médico, así como la personas en situación de riesgo, comenzarán a recibir la vacuna, mientras que el resto de la población podrá acceder a las siguientes dosis a partir de la segunda mitad de año, siempre y cuando se cumplan los plazos previstos por las autoridades.
Ardern ha comunicado que el Gobierno neozelandés tiene entre sus planes conseguir y entregar dosis de la vacuna contra la COVID-19, a niveles similares, a sus vecinos del Pacífico sur, como son los territorios insulares de Tokelau, Niue e Islas Cook.
Nueva Zelanda, gracias a su situación geográfica y a las medidas impuestas, es de los principales países menos afectados por la pandemia, con un total de 1.968 casos acumulados, de los cuales sólo 54 permanecen activos, y 25 fallecidos.
