MIAMI, 22 Sep. (OTR/PRESS) -
Tras las evasivas expresadas por el candidato republicano, John McCain en su última entrevista, su rival directo, el demócrata Barack Obama, lo tiene claro: "Por supuesto, me reuniré con Zapatero". Así se expresó respecto al jefe del Ejecutivo español, en una entrevista a las emisoras de Unión Radio en la que también tendió la mano a los dirigentes de América Latina, algunos abiertamente enfrentados con Washington. En este sentido, apostó por entablar un "diálogo respetuoso" con distintos líderes, entre ellos el presidente venezolano, Hugo Chávez, y suavizar ciertas restricciones sobre la Cuba castrista.
En una entrevista realizada la semana pasada, McCain eludió aclarar cuál será su postura respecto a España si sale elegido presidente de las próximas elecciones presidenciales en Estados Unidos, que se celebrarán dentro de mes y medio. "Me reuniría con aquellos líderes que son nuestros amigos y que quieren trabajar con nosotros en una acción cooperativa", se limitó a afirmar.
Obama vinculó hoy esta actitud esquiva con una continuidad de la doctirna 'Cheney' en la política exterior estadounidense. Como alternativa, respondió con un "por supuesto" al ser preguntado por una posible reunión con el presidente español. El senador por Illinois subrayó que España es un país aliado de la OTAN. En una entrevista a las emisoras de Unión Radio, entre las que se encuentra la Cadena Ser, aseguró además que "el hecho de que McCain indicara que tal vez no se reuniría con Zapatero, quiere decir que él seguiría con la actitud de Cheney de imponer la política exterior en lugar de construir coaliciones".
AMÉRICA LATINA
Respecto al posible acercamiento a líderes de América Latina, el senador por Illinois apostó por mantener un "diálogo respetuoso" con todos ellos, incluido el venezolano Hugo Chávez, según declaraciones recogidas por otr/press. En este sentido, lamentó que "Estados Unidos ha estado tan obsesionado con Irak" que no ha mirado lo más mínimo a sus vecinos del sur. "Mientras pasamos hablando todo un año de Irak, a América Latina le dedicamos sólo una semana, y eso ha creado un vacío que personas como Hugo Chávez han podido llenar", lamentó.
La confirmación de las posibles conversaciones con Caracas supone una declaración no exenta de riesgo para el candidato demócrata dentro de su país, ya que llega precisamente una semana después de que Chávez expulsase al embajador norteamericano como gesto de solidaridad hacia Bolivia, tras lo que se refirió a Washington con términos como "yanquis de mierda". Estas palabras sirven ahora en un anuncio de la campaña de McCain para reprochar a su rival su postura de reunirse con dirigentes extranjeros "sin condiciones".
Por otra parte, respecto a Cuba, el político afroamericano señaló que "la libertad del pueblo de Cuba es de interés nacional" y, por ello, presionará al presidente Raúl Castro de cara a la liberación de presos políticos y crear "libertad política, de expresión, de prensa y religión". Esta mano tendida no implicará una eliminación del embargo, pero sí la posibilidad de evitar trabas como "las restricciones sobre las remesas" y reducir los obstáculos a los viajes de los cubano-estadounidenses a la isla. Según agregó, el embargo seguirá hasta que haya "una señal clara de que hay libertad política en Cuba".
POLÍTICA INTERNA
Obama no sólo se refirió durante sus últimas declaraciones a la política exterior estadounidense, sino que, en clave más interna, defendió sus propuestas frente a las de McCain. Así, criticó que el político republicano sigue en épocas de crisis "la filosofía del presidente Bush y sus ocho años de gobierno, donde básicamente le ha dado más y más dinero a los ricos y a las grandes corporaciones, pero la gente corriente no ha tenido la ayuda que necesita". Obama propuso "meter más dinero en los bolsillos" de la "gente común y corriente" bajando sus impuestos y desarrollar las energías alternativas para evitar la excesiva dependencia del petróleo.
Preguntado por su candidato a vicepresidente, Joe Biden, y la posibilidad de que la ex primera dama Hillary Clinton hubiese figurado como 'número dos', el senador dijo admirar mucho a su rival durante las primarias, porque es "una compañera maravillosa", pero se declaró "muy contento" con la elección de Biden. En su opinión, "es alguien que entiende los problemas que está afrontando Estados Unidos alrededor del mundo".
