MADRID, 3 May. (EUROPA PRESS) -
Al menos ocho migrantes han muerto esta semana por diarrea aguda tras estar retenidos en un campamento militar por el Gobierno yemení en la provincia de Lahj, según ha informado la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), que ha mostrado su preocupación por la situación de unos 5.000 migrantes detenidos en tres provincias.
La agencia de la ONU está siguiendo de cerca la situación de estos 5.000 migrantes, mayoritariamente procedentes del Cuerno de África, que se encuentran detenidos en dos estadios y un campamento militar en las provincias de Adén, Lahj y Abyan.
Según ha podido saber la OIM, el miércoles al menos ocho migrantes murieron por complicaciones relacionadas con la diarrea acuosa aguda en el Hospital Ibn Jaldoon en la provincia de Lahj. Todos ellos habían estado detenidos en un campamento militar junto a más de 1.400 migrantes.
Las autoridades del cuartel han detectado al menos 200 casos de diarrea acuosa aguda, por lo que la OIM ha establecido un centro de tratamiento en el citado hospital, en el que se está tratando a 53 casos, incluidos ocho de carácter grave.
Por otra parte, catorce migrantes con signos de diarrea acuosa aguda fueron trasladados al estadio 22 de Mayo, en Adén, donde la OIM también está prestando asistencia. El equipo médico de la agencia de la ONU, ha realizado más de 1.000 consultas médicas en el lugar desde el 26 de abril, ha pedido su evacuación a un hospital cercano.
El martes, los guardias abrieron fuego contra los migrantes detenidos en el estadio de Adén, dejando al menos dos heridos de bala, uno de los cuales, un adolescente, seguramente quede paralizado de por vida, según la organización humanitaria.
"Estoy profundamente apenado por las muertes de estos ocho migrantes, que figuran entre los miles de migrantes detenidos en condiciones deplorables en todo Yemen", ha señalado en un comunicado el director de operaciones y emergencias de la OIM, Mohamed Abdiker. Desde la OIM, ha añadido, han trasladado su rechazo de esta política a las autoridades, "instándolas a adoptar un enfoque humano respecto a la migración irregular".
Según Abdiker, los migrantes detenidos, "en el mejor de los casos, solo tienen acceso limitado a servicios básicos o protección" ya que se encuentran recluidos en edificios atestados que no son aptos para que vivan en ellos personas.
Estos acontecimientos, según el responsable de la OIM, "demuestran la incapacidad de las autoridades de cuidar a la creciente población detenida así como la necesidad inmediata de que haya una autoridad civil que gestione de forma humana estos lugares".
"Nuestros equipos podían ver que sin garantizar un acceso inmediato a comida, agua potable, saneamiento seguro y atención médica, había una catástrofe en ciernes", ha resaltado Abdiker, que ha expresado la disposición de la OIM a ayudar a Yemen a encontrar "respuestas sostenibles a la migración irregular".
"Mucho me temo que esta grave situación seguirá deteriorándose", ha prevenido, confiando en que las "palabras" pronunciadas a distintos niveles del Gobierno "se traduzcan en acción que ponga fin a este abuso antes de que se pierdan más vidas inocentes"
