MADRID, 20 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) ha subrayado este viernes que la situación en la localidad yemení de Hodeida "es muy mala" y ha agregado que las agencias humanitarias trabajan "en un contexto difícil".
"La situación es muy mala y hacemos todo lo posible para dar cobijo temporal y apoyo", ha indicado el jefe de la misión del organismo en Yemen, Stefano Pes.
"Nosotros y nuestros socios trabajamos en un contexto difícil y esperamos aliviar algunas de las dificultades que experimenta la gente entregando comida, ayuda no alimentaria, cobijo y tiendas de buena calidad", ha agregado.
Asimismo, la OIM ha resaltado que las víctimas civiles y los desplazamientos siguen aumentando a causa de los combates que estallaron el 12 de junio a raíz de una operación de las fuerzas yemeníes leales al presidente reconocido internacionalmente, Abdo Rabbu Mansur Hadi, con el respaldo de la coalición que encabeza Arabia Saudí.
El organismo ha indicado que estos enfrentamientos han causado aún más daños en los servicios públicos y han afectado el suministro de agua y han forzado el cierre de tiendas, lo que ha incrementado una mayor carestía de productos básicos.
En este contexto y ante la complicación de entregar ayuda humanitaria se ha producido el cierre de un centro temporal de alimentos en Zabid, situada en la provincia de Hodeida.
El personal de la OIM ha cifrado en cerca de 50.000 los nuevos desplazados en la zona, a los que se ha entregado alojamiento, comida y atención sanitaria en Bait al Fakih, Hays y Al Juj.
La coalición había prometido una operación rápida para tomar los puertos marítimos y aéreos de Hodeida sin ingresar al centro de la ciudad en un intento de cortar la línea de suministro principal de los rebeldes huthis --respaldados por Irán-- y forzar al movimiento a la mesa de negociaciones.
Sin embargo, la ofensiva no ha avanzado, y la coalición ha anunciado el fin de las operaciones militares para dar la oportunidad a los esfuerzos de la ONU de reanudar las conversaciones de paz entre las partes en conflicto.
Ambas partes han sido criticadas por grupos de ayuda desde el comienzo de la guerra, hace tres años, en la que han muerto más de 10.000 personas. La coalición, en particular, ha estado bajo escrutinio por ataques aéreos que a menudo han destruido áreas civiles, aunque ha negado toda intencionalidad.
