MADRID, 7 Ago. (EUROPA PRESS) -
El jefe de respuesta de emergencia de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Peter Salama, ha confirmado este martes que el nuevo brote de ébola declarado en República Democrática del Congo (RDC) no está relacionado con el anterior.
Samala ha anunciado en Twitter que los resultados clínicos han confirmado que se trata de la cepa Zaire sin que se hayan observado "estrechos vínculos" con la cepa registrada en el último brote. "¿Esto qué significa? Confirma que es un nuevo brote", ha explicado.
El Gobierno de RDC anunció el 1 de agosto que cuatro personas habían dado positivo en ébola en la provincia de Kivu Norte. La noticia llegaba una semana después de que las autoridades congoleñas anunciaran el fin del brote de ébola en la provincia de Ecuador, que comenzó en abril y ha dejado 33 muertos.
En principio, tanto RDC como la OMS descartaron que los dos brotes estuvieran relacionados porque los separan 2.500 kilómetros, en los extremos noroeste y noreste del país. Sin embargo, el viernes se supo que la 'paciente cero' es una mujer de 65 años de edad que estuvo ingresada por el anterior brote de ébola hace meses.
El último brote pudo contenerse gracias a una vacuna experimental desarrollada por los laboratorios Merck que los expertos temían que no se pudiera emplear contra el declarado en Kivu Norte porque fue desarrollada para la cepa Zaire. Finalmente, también podrá usarse con los nuevos casos y, según Salama, "tan pronto como mañana".
La OMS ha alertado estos días de que el actual brote es una amenaza para toda la región porque el foco se ha localizado en una zona cercana a la frontera con Uganda. En 2014, el ébola se cobró más de 11.300 vidas en todo África Occidental.
Este brote es el décimo que sufre República Democrática del Congo desde 1976, cuando se descubrió la existencia de este virus cerca del río homónimo, que recorre la nación africana. RDC, como origen del ébola, es el país más afectado por la enfermedad en todo el mundo.
