MADRID, 7 Feb. (EUROPA PRESS) -
El secretario general adjunto de la ONU para Asuntos Humanitarios, Mark Lowcock, ha denunciado este jueves que la organización no ha podido acceder a los molinos de la región yemení de Hodeida desde septiembre de 2018, a pesar de que habría parado grano suficiente como para alimentar a 3,7 millones de personas durante un mes.
Lowcock se ha mostrado "profundamente preocupado" por este bloqueo, en la medida en que se trata de grano que "no se usa y posiblemente se esté estropeando". En diciembre, dos de los almacenes de esta zona, controlada por las fuerzas leales al Gobierno de Abdo Rabu Mansdur Hadi, fueron alcanzados por proyectiles de mortero y "probablemente" parte del suministro quedó destruido.
El responsable de la ONU ha reclamado acceso alegando que "casi diez millones de personas en todo el país están al borde de la hambruna". Además del alivio inmediato que supondría este material para cientos de miles de personas, Lowcock también ha recordado que, a medida que pasa el tiempo, "aumenta el riesgo de que se estropee el grano restante".
Los rebeldes huthis han negado a la ONU el permiso para cruzar los territorios bajo su control y llegar a la zona de molinos, supuestamente por motivos de seguridad. Las conversaciones con todas las partes continúan y, aunque Lowcock ha reconocido que hay voluntad de "encontrar una solución", el acuerdo se resiste, por lo que ha llamado a intensificar los esfuerzos para lograr avances "en los próximos días".
