BOGOTÁ, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -
La misión humanitaria encargada del operativo para liberar a seis de los secuestrados de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) concluirá hoy con la entrega del ex diputado Sigifredo López. La comisión confía en que, pese a las dificultades que ha experimentado la operación en los últimos días, esta fase final podrá desarrollarse sin inconvenientes.
Los dos helicópteros del Ejército brasileño llegaron ayer al aeropuerto Alfonso Bonilla en la ciudad de Cali, departamento de Valle del Cauca (oeste del país), donde se preparará la comisión para partir hoy después de las 08.00 horas (14.00 hora española) para recoger a López en un punto de la selva colombiana no divulgado.
La misión será nuevamente encabezada por la senadora colombiana Piedad Córdoba, después de retractarse en las últimas horas de su decisión de abandonar el proceso por considerar que las autoridades del país no valoraban lo suficiente su labor mediadora. "El acuerdo humanitario es una tarea que no se puede dejar tirada", declaró en la rueda de prensa en la que anunciaba que seguiría implicada en el asunto.
La senadora se encuentra desde anoche en Cali para ultimar los detalles de esta liberación, junto con los miembros del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y algunos integrantes de la organización Colombianos y Colombianas por la Paz. Estarán además dos médicos que se encargarán de hacerle una primera revisión al ex diputado, que está desde el año 2002 en poder de las FARC.
En esta ocasión, el operativo podría ser más largo debido a que las condiciones topográficas de la zona hacia donde saldrán los helicópteros "son mucho más complicadas". El jefe de la delegación del CICR en Colombia, Christophe Beney, informó a la prensa de que, debido a la complejidad del vuelo, tuvieron que contratar un piloto civil para que colaborara en la movilización de las aeronaves desde la ciudad de Villavicencio a Cali.
"Hemos contratado un piloto civil colombiano para que acompañará sólo para este trayecto a los pilotos brasileños porque el viaje es peligroso y delicado y no queríamos arriesgar nada", comentó Beney, al destacar el éxito de la misión de ayer que permitió la libertad del ex gobernador de Meta Alan Jara.
Por su parte, la madre de López, Nelly Tobón, expresó su emoción por el regreso de su hijo tras más de ocho años en cautiverio. "Lo estaremos esperando con mucha ansiedad para que llegue el momento en que esté unido con su esposa, sus hijos y conmigo porque los sueños son muchos de volver a tenerlo en el seno del hogar", acotó.
ÚNICO SUPERVIVIENTE
López es el único superviviente de la masacre ocurrida en junio de 2007, en la que murieron once ex congresistas que también estaban en cautiverio, cuando un grupo armado no identificado atacó el campamento de las FARC donde se encontraban los rehenes.
Documentos encontrados en el ordenador del ex jefe de las FARC, Luis Edgar Devia Silva, alias 'Raúl Reyes', revelan que el ex parlamentario se salvó de esta masacre porque se encontraba aislado del grupo, porque estaba cumpliendo un castigo.
La entrega de López es una de las más esperadas porque podría ser la única persona que aclare lo ocurrido, y explique si efectivamente se trataba de oficiales del Ejército colombiano que pretendían rescatarlos, tal y como se dijo cuando la guerrilla dio a conocer la muerte de los legisladores el 28 de junio de 2007.
Este hecho generó una gran polémica en Colombia porque se produjo poco después de que el grupo armado suministrara pruebas de superviviencia de los legisladores, quienes fueron secuestrados junto a López el 11 de abril de 2002, en un asalto de la guerrilla a la Asamblea del Valle del Cauca.
MISIÓN POLÉMICA
El regreso del ex gobernador despertó nuevamente la controversia sobre la necesidad de concretar un acuerdo humanitario para lograr la libertad de los secuestrados. A diferencia de los cuatro uniformados que fueron entregados el domingo, Jara no esperó para cuestionar la actitud del presidente colombiano, Álvaro Uribe, por considerar que "no apoya" el proceso de paz.
"Lo digo con claridad, siento de todo corazón que Uribe no hizo nada por la libertad de nosotros", expresó el ex gobernador de Meta en la rueda de prensa ofrecida ayer, momentos después de su liberación, al insistir en que la única "salida negociada" es la propuesta de las FARC de canjear guerrilleros presos en las cárceles colombianas por secuestrados.
El presidente de Colombia, quien siempre ha estado en contra del intercambio, aseguró este miércoles que está dispuesto a acceder a esa petición siempre que los guerrilleros la asuman con seriedad. "Si quieren un proceso de paz de buena fe, estamos listos. Si quieren un intercambio serio, con la condición de que los que salgan de la cárcel no vuelvan a incorporarse al fusil y al explosivo, estamos listos", aclaró.
La liberación de Jara estaba prevista para el lunes, pero el CICR decidió posponerla después de la diatriba provocada por las declaraciones de Uribe, quien apartó del proceso de entrega a la senadora Córdoba y al movimiento Colombianos y colombianas por la paz, pese a que todos ellos fueron los promotores y mediadores de esta misión humanitaria.
Finalmente, el presidente de Colombia autorizó a la congresista para que continuara con la entrega del ex gobernador, pero sin tomar en consideración a Colombianos y colombianas por la paz. Esta situación obligó a posponer la fecha de liberación de López que estaba establecida para este miércoles.
Pero eso no es lo único que puso en peligro la liberación de los seis rehenes que se comprometieron a entregar las FARC el pasado mes de diciembre. Horas antes de que Jara llegara a la ciudad de Villavicencio, el alto comisionado para la paz, Luis Carlos Restrepo, regresó a Bogotá donde, al parecer, presentó su renuncia.
Aunque esta información no ha sido confirmada por el Gobierno, la prensa local ha dicho que esta reacción obedece a que la Presidencia colombiana lo desautorizó al permitir el ingreso de periodistas al aeropuerto de Vanguardia, para dar cobertura a la llegada del ex gobernador, después de que Restrepo prohibiera la entrada de los medios por los hechos ocurridos el domingo con dos periodistas, que filtraron información desde el lugar donde se produjo la liberación de los cuatro uniformados.
El mandatario colombiano evadió la pregunta de los periodistas sobre la veracidad de la dimisión de Restrepo, y sólo se limitó a expresar su "confianza, respeto y admiración" por el "enorme esfuerzo" que ha hecho para conseguir la liberación de los secuestrados.
