O.Próximo.- La Declaración de Alicante del Foromed aboga por una Conferencia Internacional sobre Oriente Próximo

Actualizado: domingo, 29 octubre 2006 0:19

MADRID, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -

Los ministros de exteriores de doce países mediterráneos reunidos en el Foro Mediterráneo y bajo presidencia española aprobaron hoy la denominada Declaración de Alicante, un documento en el que todos los participantes en la reunión muestran su apoyo al proceso de paz en Oriente Próximo y propone la convocatoria de una conferencia internacional sobre el conflicto.

El documento aprobado por representantes de España, Portugal, Francia, Italia, Malta, Grecia, Marruecos, Turquía, Egipto, Túnez, Argelia y Libia resalta que Oriente Próximo "enfrenta su peor crisis desde hace años tras la guerra en Líbano y la continuada violencia en Territorios Ocupados", según informó a Europa Press la Dirección General de Comunicación Exterior.

Además, muestra un especial interés en la inclusión en las negociaciones de "todas las partes implicadas en el conflicto, en particular Israel, la Autoridad Nacional Palestina, Siria y Líbano" y muestra la profunda preocupación por "el punto muerto en el que se encuentra el proceso de paz y con el incremento de la violencia entre israelíes y palestinos, así como los enfrentamientos entre palestinos".

Así, aboga por "realizar un nuevo esfuerzo para resolver los problemas que subyacen en el núcleo de la crisis" y todos los signatarios de la Declaración se comprometen a trabajar conjuntamente por "una solución justa, global y duradera del conflicto árabe-israelí".

Menciona explícitamente el apoyo a la "solución de los dos estados que resulte en un Estado palestino viable, contiguo, soberano e independiente, que pueda vivir en paz junto a Israel dentro de unas fronteras reconocidas y seguras, establecidas sobre la base de las fronteras de 1967".

Asimismo, destaca que la resolución 1701, que puso fin a las hostilidades entre Israel y la guerrilla chií libanesa Hezbolá, "proporcionado un nuevo impulso para relanzar el proceso de paz".

Como objetivos a corto plazo, la Declaración cita el "desarrollo de medidas de confianza, como la liberación de soldados y prisioneros y la transferencia de ingresos fiscales" y "un sistema de gestión de fronteras basado en la cooperación".

Además anuncia su apoyo a la Autoridad Palestina, "piedra angular del futuro Estado Palestino", y "los continuos esfuerzos desplegados por su Presidente para la formación de un gobierno palestino con el que la Comunidad Internacional pueda cooperar plenamente", en referencia a las objeciones de Hamás a reconocer el Estado de Israel. También pide el inmediato fin de la violencia y "la restauración de canales y prácticas de diálogo a todos los niveles entre las partes"

A más largo plazo, la Declaración propone "un proceso multilateral renovado", negociaciones "basadas en los términos de referencia aceptados por todas la partes en la Conferencia de Madrid de 1991, en las resoluciones relevantes del CSNU, así como en parámetros claros sobre la solución de los temas del estatuto final", la convocatoria de una conferencia internacional "destinada a demostrar el compromiso político con el renovado Proceso de Paz multilateral" y una "reactivación y revisión de la Hoja de Ruta".