JERUSALÉN, 18 Nov. (EP/AP) -
Washington presiona al Gobierno israelí para que realice más concesiones previas para impulsar la próxima conferencia de paz para Oriente Próximo que ha convocado la Administración del presidente George W. Bush en Annapolis (Estados Unidos). En concreto, los estadounidenses piden la paralización total de la construcción de asentamientos en los Territorios Palestinos y la liberación de un mayor número de presos palestinos, según fuentes del Gobierno israelí.
Estos gestos previos parecen fundamentales para mantener la esperanza de que la cumbre que podría celebrarse este mismo mes en Annapolis (Maryland) tenga éxito, pero Israel mantiene que sólo construye las viviendas necesarias para permitir el "crecimiento natural" de la población de colonos.
El primer ministro israelí, Ehud Olmert, propondrá al Gobierno la liberación de 450 presos, un número muy inferior a los 2.000 presos que pide la Autoridad Palestina, que busca, por su parte, reforzar su posición política dentro del espectro palestino ante la rivalidad del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), que ya controla la Franja de Gaza.
Olmert y Abbas se reunirán mañana lunes para seguir negociando avances de cara a un eventual relanzamiento de las negociaciones formales de paz, rotas desde hace siete años tras el comienzo de la Segunda Intifada, desencadenada por la visita del entonces candidato del Likud, Ariel Sharon, a la Explanada de las Mezquitas.
La entrevista se celebrará en Jerusalén Oeste, según confirmó el secretario general de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Yasir Abed Rabo, citado por la web palestina de noticias IMEMC.
