CIUDAD DE GAZA, 6 Jul. (EP/AP) -
La Federación Internacional de Periodistas pidió hoy una investigación del ataque sufrido por un cámara de un canal de televisión vinculado al Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) que resultó herido en Gaza mientras cubría un enfrentamiento entre milicianos palestinos y las fuerzas israelíes.
La Federación Internacional de Periodistas denunció a Israel por su "ejemplo despiadado y brutal de un ataque deliberado a un periodista".
Una portavoz del Ejército israelí, la mayor Avital Leibowitch, dijo que no estaba claro quién disparó a Imad Ghanem, un cámara de 21 años del canal de televisión Al Aqsa, vinculado a Hamás. Aunque no negó la posibilidad de que fueran soldados israelíes, dijo que no existían planes de investigar los hechos.
Las piernas de Ghanem tuvieron que ser amputadas ayer después de que llegara al hospital en estado grave, informaron los médicos. Hoy, el joven cámara permanecía en una unidad de cuidados intensivos.
Leibowitch consideró que el cámara era un blanco legítimo porque se encontraba con milicianos de Hamás que efectuaban disparos a las fuerzas israelíes, permanecía separado de otros periodistas que cubrían el enfrentamiento y podría haber tenido un arma. El tiroteo fue filmado y transmitido por el canal de televisión Al Yazira, pero en las imágenes no se ve quién disparó a Ghanem.
Desde el hospital, Ghanem explicó que primero fue alcanzado por las balas cuando filmaba la evacuación de milicianos heridos por disparos de un tanque israelí. "Caminé adelante de ellos mientras llevaban a los heridos en una camilla de metal. Luego comenzó el tiroteo. Una bala alcanzó mi pierna y caí al suelo. No pude moverme después", sostuvo.
Ghanem aseguró que el tanque siguió disparándole cuando permanecía tirado en el suelo. "Cada vez que alguien venía a rescatarme, les disparaban", indicó. El reportero afirmó que su cámara estuvo a la vista en todo momento.
"Este hombre llevaba una cámara, no un arma", declaró Aiden White, secretaria general de la federación de periodistas. "No era una amenaza para las fuerzas israelíes. Pareciera que Israel cree que es posible matar a un periodista con impunidad mientras puedan desprestigiarlos como propagandistas", agregó.
