JERUSALEN, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
Las fuerzas de seguridad israelíes se encuentran hoy en estado de máxima alerta en todo el país tras el ataque cometido ayer por un palestino en una escuela judía de Jerusalén en el que murieron ocho personas.
La Policía ha elevado el nivel de alerta ante la celebración de la tradicional oración musulmana del viernes en las mezquitas en Jerusalén, tras recibir informaciones de los servicios de inteligencia de que los fieles palestinos podrían intentar alterar el orden al término de las mismas según informa el diario 'Haaretz'.
Por ello, sólo los musulmanes mayores de 45 con tarjetas de identidad válidas azules tendrán permiso para acceder a la Explanada de las Mezquitas para la oración de hoy, mientras que no habrá restricciones para las mujeres, según informó la radio militar.
Por otra parte, está previsto que hoy se celebren los funerales de las víctimas, todas ellas de entre 15 y 19 años, menos uno que tenía 26. Los cortejos fúnebres partieron del mismo seminario de Mercav Harav donde anoche se produjo la tragedia a las 10:00 horas.
A su salida, algunos estudiantes pidieron venganza al grito de "muerte a los árabes". Anoche, la noticia del ataque había sido recibida con celebraciones de júbilo por miles de palestinos en la Franja de Gaza, controlada por Hamás.
Entretanto, la Policía confirmó esta mañana que el palestino autor de la matanza tenía una carnet de identidad azul israelí y residía en Jerusalén Este. Según indicó el comandante del Departamento de Operaciones de la Policía, Yoram Ohayon, el asaltante procedía de la localidad de Jabil Mukaba y la Policía está tratando de verificar si actuó con algún cómplice, según la radio.
Por su parte, el jefe de la Policía de Jerusalén, comandante Aharon Franco, indicó que la Policía encontró durante la noche un coche que se cree que fue usado por el agresor, ya que se trata del vehículo de trabajo de éste.
