JERUSALÉN, 11 Sep. (EP/AP) -
Fuentes oficiales israelíes aseguraron, al término de la sesión extraordinaria del gabinete de seguridad convocada esta mañana por el primer ministro, Ehud Olmert, para acordar la respuesta al lanzamiento de un Qassam contra una base militar israelí que ayer de madrugada dejó 69 militares heridos, el Ejecutivo de Tel Aviv descarta por el momento lanzar una incursión a gran escala en la Franja de Gaza.
Según las fuentes, que pidieron el anonimato dado que la sesión acabó sin declaraciones a los medios, Israel se muestra escéptico de la conveniencia de abrir un segundo frente, en un momento de tensiones crecientes entre Israel y Siria, después de que el miércoles de madrugada aviones militares israelíes invadieran el espacio aéreo sirio, además de para no perjudicar la conferencia internacional de paz para Oriente Próximo, prevista para noviembre y auspiciada por Washington.
Asimismo, explicaron, que si Israel ha decidido evitar una operación a gran escala en la Franja, puede no obstante intensificar sus ataques aéreos contra milicianos palestinos que lanzan cohetes contra territorio israelí.
Estados Unidos ha instado a Israel a mostrar contención, después de que el portavoz del Departamento de Estado, Sean McCormack, explicó que Washington "sólo aconseja, en este caso en que Israel ha padecido heridas y pérdidas como resultado de ataques, a tomar en consideración los efectos que tendría su autodefensa en el conjunto del proceso político".
Fuentes del Ejército israelí, tras confirmar hoy que éste permanece en alerta máxima en su frontera con Siria, reconocieron que el Ejército es reacio a movilizar una gran cantidad de tropas durante el Nuevo Año Judío, que comienza este miércoles por la tarde.
El Ejército israelí, como medida rutinaria, ordenó el cierre de los pasos fronterizos entre Israel y Cisjordania e Israel y la Franja de Gaza, antes de que arranque precisamente el Nuevo Año Judío. En un comunicado, el Ejército no aclaró hasta cuándo se prolongarán dichos cierres y se prohibirá la presencia de palestinos en territorio israelí, salvo algunas excepciones, incidió, por motivos humanitarios.
Horas después del ataque ayer de madrugada contra la base de entrenamiento israelí de Zikim, reivindicado por la Yihad Islámica y los Comités de Resistencia Popular, aviones israelíes destruyeron una lanzadera de cohetes en el norte de la Franja sin que nadie resultara herido, informaron testigos, aunque fuentes médicas palestinas aseguraron que al menos cuatro civiles, entre ellos, dos menores, resultaron heridos.
