RIAD, 6 May. (EP/AP) -
Los líderes de seis países del Golfo Pérsico analizaban hoy sábado en Riad los principales problemas de la región, especialmente la disputa internacional por el programa nuclear de Irán, según un comunicado oficial.
Diplomáticos árabes manifestaron que durante el encuentro también se examinaría la inestabilidad en Irak y la situación en los territorios palestinos.
Una declaración escrita del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), organismo que incluye a Bahrein, Arabia Saudí, Kuwait, Oman, Qatar y los Emiratos Arabes Unidos, expresó que durante la reunión de "consultas", los líderes abordarían algunos hechos recientes en la región.
El secretario del grupo analizó la agenda con el ministro de Asuntos Exteriores de Arabia Saudí, Saudi al Faisal, pero la agencia oficial de noticias saudí no ofreció otros detalles. Los miembros del consejo, una alianza política y militar, están cada vez más preocupados por los programas nucleares de Teherán. En diciembre, durante una cumbre del consejo, el ministro de Asuntos Exteriores de los Emiratos Arabes Unidos expresó su temor por el programa iraní. Algunos analistas locales también han advertido a los Estados del Golfo Pérsico que no deben mantener "silencio" sobre este tema.
"No habrá paz ni seguridad en la región sin la implementación de la demanda de los países del Golfo (Pérsico) y árabes para que todo Oriente Próximo esté libre de armas de destrucción masiva, y especialmente de armas nucleares", señaló el diario saudí 'Al Madina' en su edición de hoy.
El encuentro "representa un mensaje importante en un momento muy crucial para analizar la crisis de Irán con Occidente por su situación nuclear, o las situaciones en Irak y Palestina", manifestó 'Al Yawm', otro diario saudí.
Los diplomáticos dijeron que además del conflicto nuclear iraní, los líderes también revisarían la situación de Irak después de la elección de sus nuevas autoridades. Algunos de los países del Golfo Pérsico --que tienen una población principalmente suní-- han manifestado sus preocupaciones por el Gobierno, controlado por los chiíes en Bagdad, muy cercanos a los chiíes de Irán.
Asimismo, informaron de que los líderes también buscaban evaluar la forma de obtener dinero para el recientemente elegido Gobierno palestino.
Algunas potencias occidentales como Estados Unidos y la Unión Europea cancelaron su ayuda financiera directa a la Autoridad Palestina porque el Gobierno liderado por el movimiento fundamentalista islámico Hamás se niega a reconocer a Israel y a renunciar a la violencia. Esto ha causado una situación difícil en los territorios palestinos, donde el Gobierno es el mayor empleador. Las autoridades aún no han pagado los salarios de marzo y abril.
