JERUSALÉN, 14 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) está cada vez más presionado por todos los frentes y ya no mantienen comunicación los dirigentes del partido islámico en el exilio y los que permanecen en la Franja de Gaza, según informó hoy el rotativo kuwaití 'Al Jareeda'.
Tanto el Ejecutivo saudí como el jordano rechazaron una invitación del líder de Hamás, exiliado en Damasco, Jaled Meshal, para reunirse con él, ya que antes exigen que Hamás devuelva el control de la Franja a la Autoridad Palestina, presidida por el presidente palestino, Mahmud Abbas, del rival Al Fatá.
En este sentido, tanto Riad como Amán insistieron en que no dejarán entrar a Meshal en sus respectivos países hasta que renuncie al control de la Franja, según el citado diario.
Según se hizo eco la agencia de noticias palestina Maan, un dirigente de Hamás aseguró al diario kuwaití que el partido islámico rechazaba someterse a estas condiciones, ya que sería un reconocimiento explícito al Ejecutivo de emergencia nombrado por Abbas en Cisjordania como el único legítimo en los territorios palestinos.
Siempre de acuerdo con el diario, las autoridades saudíes y egipcias habrían trasladado al liderazgo de Hamás que Meshal no tiene un estatus oficial, dado que no ha ratificado los Acuerdo de Oslo, suscritos entre Israel y la Organización para la Liberación de Palestina en 1993, así como por el hecho de que ni siquiera reside en los territorios palestinos. Asimismo, habrían manifestado que están esperando a que Hamás envíe una delegación de la formación salida de los territorios palestinos.
Un dirigente del Movimiento de Resistencia Islámica admitió hace dos semanas la falta de comunicación entre "el Hamás dentro del país" y "el Hamás en el exilio", cuando describió la situación en el seno del partido de "suicidio lento", por el bloqueo al partido islamista y por los crecientes problemas que acechan a la Franja de Gaza.
