JERUSALÉN, 19 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno sirio ha agradecido la "declaración de buenas intenciones" representada en los esfuerzos estadounidenses para acercar posturas entre Israel y Damasco, pero ha expresado su escepticismo sobre la voluntad del Estado hebreo "a la hora de estar preparado para hacer las paces", según fuentes sirias bajo condición de anonimato al diario panárabe 'Asharq al Awsat'.
Así se ha comentado en Siria la visita del enviado especial de Estados Unidos para Oriente Próximo, George Mitchell, quien se reunió el pasado jueves en Damasco con el presidente sirio Bashar al Assad para contemplar opciones de reapertura de relaciones diplomáticas entre Siria e Israel, demacradas desde 1967.
Posteriormente, fue el presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, quien se desplazó a la capital siria para entrevistarse con su homólogo. Este viaje habría servido para que Ahmadineyad se asegurara de que los intentos de Estados Unidos para enfriar las relaciones sirio-iraníes no han tenido éxito. Como adelantó el presidente iraní, en el encuentro con Al Assad se iban a discutir "los movimientos occidentales en la región" y, al término del encuentro, realizó un llamamiento a mantener la "armonía" de la región.
De igual modo, Ahmadineyad aseguró que varios países de la región están preparados para "obstaculizar" los planes de Estados Unidos e Israel para "cambiar el escenario de Oriente Próximo", sin dar más detalles, citado la agencia oficial de noticias iraní, IRNA.
"Aquellos que deseen cambiar la geografía política de la región deben saber que no tienen cabida en su futuro. Las oleadas de naciones libres que se unen a esta resistencia están aumentando todos los días", añadió.
