WASHINGTON, 15 Mar. (EP/AP) -
El enviado de la ONU para Oriente Próximo, James D. Wolfensohn, advirtió hoy de caos, pobreza y violencia en los Territorios Palestinos si la comunidad internacional no desbloquea las ayudas a la Autoridad Palestina (ANP). "No creo que puede haber millones de palestinos hambrientos y paz" al mismo tiempo, indicó Wolfensohn.
El enviado, cuyo futuro en el cargo es incierto debido a que contempla dimitir, declaró que puede llevar meses encontrar la forma de ayudar a los palestinos sin entrar en contacto con Hamás.
Según dijo Wolfensohn a ambos lados de la balanza en esta materia se encuentran las vidas de millones de palestinos, la estabilidad de la región y el estancado proceso de paz. Aún así, insistió en el principio de no negociar con Hamás hasta que no renuncie la violencia y reconozca el Estado de Israel.
Recordó la postura del Cuarteto constituido por Estados Unidos, Unión Europea, Rusia y la ONU que insiste en el desarme del grupo. "Estoy completamente de acuerdo con esta postura", aseveró.
"Necesitamos tiempo para determinar los principios a aplicar de cara a abordar las condiciones de vida de los palestinos", afirmó remarcando que la ayuda procedente de la ONU, grupos humanitarios privados y la Iglesia es urgente.
"Si tenéis a millones de niños palestinos en las calles como se puede tener paz?", preguntó. "Los niños no tendrán colegio y habrá caos en las calles", vaticinó.
