BUDAPEST, 8 Mar. (Reuters/EP) -
El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, ha advertido este viernes de que su formación, el nacionalista Fidesz, podría abandonar el Partido Popular Europeo (PPE) en un momento en el que se está debatiendo sobre la posibilidad de su expulsión.
El líder del PPE, Manfred Weber, reclamó el martes al Fidesz que retirase los carteles que colocó en su país en los que ataca al presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, y que son parte de su estrategia de cara a las elecciones europeas de mayo.
El jefe de Gabinete de Orbán, Gergely Gulyas, ha asegurado que los carteles serán reemplazados la semana que viene por otros que promocionan los planes del primer ministro Orbán para aumentar la natalidad.
Orbán ha asegurado en la radio pública que su preferencia es reformar el PPE y hacerle virar hacia posturas más contrarias a la migración, pero también ha dejado la puerta abierta a la salida del Fidesz del partido europeo, que se reúne el 20 de marzo para discutir su expulsión.
"El debate podía terminar con Fidesz buscando su lugar fuera del Partido Popular", ha reconocido Orbán en una entrevista. "Si tuviésemos que empezar algo nuevo, entonces obviamente el primer sitio en el que comenzaríamos el diálogo sería Polonia", ha adelantado el primer ministro a la vez que ha recordado que el partido gubernamental conservador polaco Ley y Justicia (PiS) no es miembro del PPE.
Además, ha explicado que habló el jueves con Juncker y Weber y que el domingo tiene planeado viajar a Polonia. Varsovia y Budapest ya han bloqueado cualquier intento de sanciones de la UE a los países del bloque del este por la baja calidad de algunos estándares democráticos.
Orbán ha anunciado que el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, visitará Budapest el 15 de marzo, con motivo del día nacional húngaro, cuando está previsto que dé un discurso que todos los años suele estar plagado de críticas a Bruselas.
