Los países de Europa Central, bálticos y nórdicos piden una misión de observación de la UE "lo antes posible"

Actualizado: viernes, 7 marzo 2014 13:06

MADRID, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -

Los ministros de Exteriores de Europa Central, los países bálticos y los nórdicos han condenado este viernes la intervención militar de Rusia en Ucrania y han calificado de "ilegal" el referéndum previsto en la región ucraniana de Crimea, al tiempo que han reclamado a la UE que envíe una misión de observación.

El grupo de países, muchos de los cuales comparten frontera con Rusia o Ucrania y tienen recuerdos vivos del régimen soviético, han adoptado una línea dura frente a Moscú a medida que ha escalado la tensión.

Los ministros de Exteriores de los países nórdicos y bálticos y del Grupo de Visegrado han condenado "el ataque contra la soberanía y la integridad territorial de Ucrania por la Federación Rusa" y han pedido a Moscú que "retire inmediatamente sus fuerzas armadas a sus bases permanentes, como estipulan los acuerdos".

Asimismo, han expresado su condena por "la decisión de celebrar un referéndum ilegal en Crimea sobre la anexión a la Federación Rusa" ya que consideran que "viola la Constitución ucraniana y por tanto es inaceptable".

Por otra parte, los doce países reunidos han mostrado su disposición a ayudar al Gobierno de Ucrania en las reformas que tiene por delante y han defendido la "creación de una misión de observación encabezada por la UE, que debería desplegarse lo antes posible".

Los ministros de Exteriores de Polonia, República Checa, Eslovaquia y Hungría, conocidos como los Cuatro de Visegrado, y los de los países bálticos (Estonia, Letonia y Lituania) y nórdicos (Suecia, Dinamarca, Noruega, Finlandia e Islandia) se han reunido en la ciudad estonia de Narva, en la frontera con Rusia.

El Parlamento de Crimea votó ayer a favor de la anexión a Rusia y su nuevo Gobierno prorruso ha fijado para el 16 de marzo la celebración de un referéndum que avale dicho paso.

El ministro de Exteriores polaco, Radoslaw Sikorski, ha defendido que la UE tiene que reforzar su política de defensa y actualizar sus capacidades de gestión de crisis ante los acontecimientos que se están produciendo en sus fronteras. "Se trata de un reto que no deseábamos, pero que está golpeando a nuestras puertas", ha añadido, según informa Reuters.