Panamá dice que la postura de la OEA "no propicia un diálogo nacional" en Venezuela

Actualizado: sábado, 8 marzo 2014 23:35

CARACAS, 8 Mar. (EUROPA PRESS) -

Panamá ha considerado que la declaración emitida por el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) "no propicia un diálogo nacional" entre Gobierno y oposición en Venezuela, como pretendía el Ejecutivo de Ricardo Martinelli.

"Consideramos que la decisión adoptada por el Consejo Permanente de la OEA no propicia un genuino diálogo nacional con la participación de todos los sectores sociales y políticos", ha dicho el Ministerio de Exteriores en un comunicado.

El Gobierno de Martinelli ha indicado que "tampoco determina líneas de acción para que la OEA dé seguimiento y contribuya de manera más activa al logro de un verdadero diálogo con miras a alcanzar la paz en Venezuela".

"No podemos apoyar decisiones que, solo con el pretexto del consenso y tratando de quedar bien con todas las partes, no profundizan en la búsqueda de soluciones a graves problemas como los que atraviesa la sociedad venezolana", ha explicado.

Así, ha señalado que "se ha visto obligado a votar en contra de la declaración de la OEA al considerar que no cumple con los objetivos que animaron a Panamá a llevar una propuesta de diálogo multilateral que permitiera proponer ideas para el acercamiento de todos los sectores de la sociedad venezolana y el Gobierno de ese país".

APOYO A LA POSTURA PANAMEÑA

No obstante, la Cancillería ha reconocido que dicha declaración "aborda temas importantes como el respeto a los Derechos Humanos, el repudio a la violencia y a la intolerancia, condolencias por las víctimas y aliento al diálogo".

"Esta declaración demuestra que la iniciativa de Panamá era correcta, ya que propició que el tema se debatiera en el seno del organismo más representativo del continente y que se generara más conciencia", ha estimado.

Asimismo, ha sostenido que "ha quedado en evidencia que los mismos temas sobre los que se ha encontrado un grado de consenso en la declaración de la OEA fueron aquellos que el Gobierno de Venezuela, lamentablemente, tachó de 'intervencionistas'".

Con ello, Panamá ha insistido en que la iniciativa en la OEA ha sido usada por Venezuela "como excusa para llamar a consultas a su embajadora, para los insultos y acusaciones preferidos contra del jefe del Estado y el canciller, y para la ruptura unilateral de relaciones".

EL OBJETIVO DE PANAMÁ

El Ministerio de Exteriores de Panamá ha aclarado que con su iniciativa "solo buscaba plantear una alternativa para un debate respetuoso sobre ideas e iniciativas que coadyuvasen al diálogo entre los venezolanos".

"Hemos apostado por la paz del hermano país fundamentando esta búsqueda en el más estricto respeto a los principios y propósitos establecidos en la Carta de la OEA, así como en el respeto a los derechos y libertades fundamentales", ha insistido.

Panamá ha defendido que "se ha apegado del principio de la no intervención de los asuntos internos de otros estados". "Nadie puede sugerir que una simple reunión en la OEA, realizada con arreglo a las normas, sea una 'injerencia'", ha reiterado.

A pesar de todo ello, ha dicho que "respeta la decisión adoptada por la OEA sobre la situación que afecta al hermano pueblo venezolano", aunque ha reafirmado "su voluntad de continuar apoyando iniciativas que conlleven a un diálogo nacional inclusivo".

"Panamá ha demostrado que es un país dialogante, creyente en el Sistema Interamericano, en el respeto entre los estados y amante de la paz que desea mantener las mejores relaciones con todos los estados", ha concluido.

RUPTURA DE RELACIONES

El presidente venezolano, Nicolás Maduro, anunció el pasado miércoles que, "frente a la conspiración abierta", había decidido "romper relaciones políticas y diplomáticas y congelar las relaciones comerciales con el Gobierno de Panamá en defensa de la soberanía de la patria venezolana".

El jefe de Estado detalló después que la ruptura de relaciones comerciales supondrá también "la suspensión del proceso de revisión de una presunta deuda en dólares de empresas privadas venezolanas con exportadores de la ZLC, donde se han detectado graves irregularidades que se seguirán investigando a nivel penal".

Maduro explicó que "hay maniobras por parte del Gobierno de Estados Unidos en conchupancia con un Gobierno lacayo, de un presidente que ya en los próximos meses se va, de derecha, que no es digno de su pueblo, que ha estado actuando activamente contra Venezuela". "Se trata del presidente de Panamá", señaló.

DEBATE EN LA OEA

El líder 'chavista' tomó esta decisión después de que Panamá, a través de su embajador en la Organización de Estados Americanos (OEA), Arturo Vallarino, insistiera en convocar una sesión extraordinaria del Consejo Permanente para abordar la crisis en Venezuela.

Estaba previsto que el Consejo Permanente de la OEA celebrara una sesión extraordinaria el pasado 27 de febrero para abordar la crisis política en Venezuela y, en caso de ser necesario, convocar una reunión de consulta de los ministros de Exteriores.

Sin embargo, el embajador de Venezuela en la OEA, Roy Chaderton, pidió al bloque hemisférico que dejara sin efecto dicha convocatoria "puesto que la misma fue efectuada en ausencia del presidente del Consejo Permanente, Pedro Vergés Ciman, en contravención del artículo 6".

Panamá insistió en reunir al Consejo Permanente, que finalmente ayer, tras varias horas de debate a puerta cerrada, emitió, por 29 votos a favor y tres en contra --de Estados Unidos, Canadá y Panamá--, una declaración de "solidaridad" con Venezuela en la que llama al diálogo entre Gobierno y oposición.

Esta declaración descartar el envío de una misión de observación a Venezuela, así como una futura reunión de los ministros de Exteriores de la OEA, tal y como había pedido Panamá, que podría tomar decisiones de mayor calado.

El Gobierno de Maduro ha interpretado esta reacción de la OEA como una "victoria del pueblo venezolano y de la América Latina libre e independiente".

UNASUR VS OEA

El ministro de Exteriores de Venezuela, Elías Jaua, ya anunció que el Gobierno acudiría a la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) para debatir la crisis política porque es "más eficiente" que otras organizaciones regionales para "desactivar golpes" de Estado.

El jefe de la diplomacia venezolana se refirió así a la OEA, a la que el Gobierno de Maduro ha acusado en numerosas ocasiones de ser parcial en el análisis de las crisis políticas regionales porque --según argumenta-- está a las órdenes de la Casa Blanca.

Por ello, Venezuela ha solicitado a Surinam, que ostenta la Presidencia 'pro tempore', que convoque una reunión de cancilleres de UNASUR, que se celebrará el próximo miércoles en Santiago de Chile, para abordar la crisis política en el país.

La crisis política en Venezuela se desató el 12 de febrero, cuando arrancaron las protestas antigubernamentales y la represión de las mismas por parte de las fuerzas de seguridad y de civiles armados, lo que ha dejado al menos 50 muertos y cientos de heridos y detenidos.