BUDAPEST, 2 Oct. (Reuters/EP) -
El Parlamento de Hungría ha aprobado este martes una nueva regulación que obliga a los inversores ajenos al Espacio Económico Europeo a solicitar el permiso del Gobierno para poder entrar en sectores que son considerados clave para la seguridad nacional, tales como servicios públicos, producción de armamento y servicios financieros.
El Ejecutivo de Viktor Orban ha esgrimido que la nueva ley no va dirigida contra ningún país en concreto, después de que haya crecido en la UE el temor a los efectos a largo plazo de la cada vez mayor presencia China.
Según alega, se trata solo de mantener bajo control ciertos ámbitos, para lo cual se ha establecido la obligatoriedad de contar con un permiso si se quiere adquirir más del 25 por ciento de una empresa privada o si se supera el umbral del 10 por ciento en el caso de una pública.
El proceso de autorización se puede prolongar hasta 60 días o incluso más si se presenta un recurso, recoge el texto, que aún debe ser promulgado por el presidente de Hungría.
Doce países de la UE ya cuentan con mecanismos de revisiones similares a los que aplicará Hungría, entre ellos Austria, Dinamarca, Alemania, Finlandia y Francia.
