KATOWICE, 29 Ene. (EP/AP) -
Los equipos de rescate han asegurado hoy, después de 20 horas de búsqueda a temperaturas de frío extremo, que no esperan encontrar más víctimas bajo los escombros del centro de convenciones que vio ayer cómo se derrumbaba su techo, con hasta 500 personas en su interior, en Katowice, una localidad al sur de Polonia. Por el momento, son 66 las víctimas mortales y hay 160 heridos.
"Hay una baja posibilidad de que la gente esté todavía atrapada ahí abajo", aseguró el jefe de los bomberos de Katowice, después de desplazarse hasta el lugar de la tragedia.
El techo se desplomó bajo el peso de la nieve, cuando medio millar de personas asistían a una exhibición de palomas mensajeras. La cifra de muertos aumentó de manera sostenida esta madrugada mientras los grupos de rescate excavaban entre los restos del edificio. El techo se derrumbó alrededor de las 17:30 roas locales.
Uno de los supervivientes, Tadeusz Dlugosz, fue sacado de entre los escombros y poco después se enteró de que su hijo de 26 años, que estaba recorriendo otra parte de la sala, murió al caer el techo. Esta mañana, Dlugosz deambulaba por la zona, tratando de determinar dónde había sido trasladado el cadáver de su hijo.
"Él tuvo la idea de venir a esta feria, y aquí encontró su tumba", declaró Dlugosz. "Ignoro a qué morgue lo llevaron. Quiero verlo y llevarlo conmigo tan rápido como sea posible", agregó.
Según explicó el jefe de la brigada de bomberos de la región de Silesia, Janusz Skulich, al menos 66 personas murieron. Entre los muertos había un agente de Policía encargado de organizar medidas de seguridad para la exposición, declaró por su parte Janusz Jonczyk, portavoz de la Policía, y añadió que hay al menos 160 personas heridas.
Las esperanzas de encontrar a supervivientes parecían desvanecerse durante la madrugada a raíz del intenso frío. La temperatura en la zona era de 17 grados centígrados bajo cero. Además, las cuadrillas no han encontrado a ninguna persona con vida desde las 22:00 horas de anoche.
FUNERAL POR LAS VÍCTIMAS
El primer ministro polaco, Kazimierz Marcinkiewicz, se unió a miles de personas que se congregaron esta mañana en la catedral de Cristo Rey, en Katowice, para orar por las víctimas de la tragedia.
Asimismo, el presidente del país, Lech Kaczynski, declaró el estado de luto oficial en Polonia desde las 16:00 horas de hoy hasta el próximo miércoles. "Esta es la mayor tragedia de la tercera República Polaca", indicó. "Han muerto 66 personas, entre ellas dos niños y dos extranjeros", señaló.
Se ignora cuántas personas más podrían encontrarse todavía bajo los escombros. Algunas personas atrapadas bajo los escombros usaron sus teléfonos móviles para llamar a sus familiares o a los servicios de emergencias.
Un portavoz del Gobierno de Silesia, Krzysztof Mejer, indicó que 13 extranjeros se encuentran entre los heridos. Además, un ciudadano belga y otro checo perdieron la vida.
El Ministerio belga de Asuntos Exteriores confirmó la muerte de un compatriota y agregó que otros tres se encuentran entre los heridos y que uno más permanece desaparecido.
Varias jaulas para aves quedaron aplastadas y esparcidas cerca de la entrada al centro, y decenas de palomas permanecían sobre las vigas retorcidas del techo colapsado, con las plumas erizadas por el frío.
