BERLÍN, 15 Abr. (DPA/EP) -
El presidente alemán, Frank Walter Steinmeier, ha expresado su preocupación por el creciente deterioro de la situación entre Rusia y las potencias occidentales -a raíz del caso del ex espía ruso Sergei Skripal-, ante lo que ha hecho un llamamiento para que se lleven a cabo nuevas iniciativas diplomáticas que aspiren a una mejora de las relaciones con Moscú.
"A pesar de lo totalmente irrespetuoso que ha sido el presidente Vladimir Putin, no debemos declararnos enemigos de toda Rusia, del país, de su gente", ha explicado Steinmeier en declaraciones al diario 'Bild Am Sonntag'.
El envenenamiento de Skripal y su hija en la ciudad británica de Salisbury es muy alarmante, ha emplazado Steinmeier, pero "el creciente distanciamiento entre Rusia y Occidente, que va a tener consecuencias más allá del caso, debería resultar igual de preocupante", ha asegurado.
El presidente ha explicado que en estos momentos, no existe ningún tipo de confianza entre ambos partidos, y que el "verdadero reto" es asumir la iniciativa e intentar propiciar un acercamiento entre las potencias enfrentadas.
La sociedad, ha asegurado, no debería "estar dominada por una atmósfera apocalíptica basada en la relación con un vecino difícil". Según ha afirmado Steinmeier, que fue antiguo ministro de Exteriores, el Gobierno alemán tiene la responsabilidad de mantener tanto la unidad en la Unión Europea como sus capacidades para actuar, por lo que debería informar al Kremlin del daño que sus actuaciones están causando a la relación entre Moscú y la UE.
"Esto incluye sanciones a raíz de la anexión de la península de Crimea y el conflicto en el este de Ucrania", ha apuntado. "Pero debemos continuar abordando estos temas en conversaciones directas", ha añadido.
