SOFÍA, (Reuters/EP)
El presidente de Bulgaria y los líderes empresariales han pedido a los partidos políticos que lleguen a un acuerdo sobre la formación de Gobierno y eviten otras elecciones que podrían inestabilizar la situación en el país balcánico.
El partido de centroderecha GERB ganó las elecciones el domingo pero se quedó a doce escaños de conseguir la mayoría. Los vencedores tendrán que iniciar las conversaciones con sus posibles aliados para formar el quinto Gobierno de Bulgaria en dos años. Un alto cargo del partido ha advertido de la posibilidad de otros comicios para Navidad si las conversaciones fracasan.
Las conversaciones podrían acabar con la formación de una coalición frágil e incapaz de impulsar las reformas económicas que necesita Bulgaria. Tampoco se descartan protestas masivas y mociones de censura que ya supusieron un obstáculo para la anterior Administración socialista. La falta de consenso podría agravar, además, la crisis financiera del país, la peor desde los 90.
El presidente de Bulgaria, Rosen Plevneliev, ha criticado que celebrar "elecciones tras elecciones" no es la solución. "No podemos decir a los búlgaros 'no habéis votado correctamente, ahora vamos a hacerlo otra vez'", ha añadido.
El resultado de las elecciones ha reflejado el voto más fracturado desde la caída del comunismo hace 25 años. Solo el doce por ciento de los búlgaros confía en el Parlamento, según un sondeo de Gallup.
"Nuestros políticos son tan avariciosos e irresponsables que espero nuevas elecciones y un alto coste para el Estado para Año Nuevo", ha dicho Valentin Grekov, un joven de 29 años que trabaja como mensajero.
TREMENDO DESAFÍO
La victoria del GERB podría significar el regreso al poder de su líder, Boiko Borisov, exvigilante y bombero que fue primer ministro entre 2009 y 2013. Borisov fue derrocado por las protestas ante los altos precios de la electricidad y el bajo nivel de vida.
GERB empezará el próximo lunes las conversaciones con otros partidos para formar Gobierno. "Con ocho partidos en el Parlamento, formar un nuevo Gobierno de coalición probaría un formidable desafío", ha señalado UniCredit en un comunicado difundido este martes. "Vemos la formación de un Gobierno de minoría como el resultado más probable de lo que promete ser una ronda alargada y traumática de conversaciones de coalición", ha precisado.
Las revueltas políticas y la crisis bancaria han echado a perder el clima empresarial de Bulgaria. El crecimiento económico es muy lento y la inversión extranjera ha caído más de un cinco por ciento este año.
La nueva administración tendrá que persuadir al Parlamento para que deje al Gobierno elevar la nueva deuda para financiar el gran déficit fiscal, dar reservas de liquidez a los sistemas bancarios y cubrir el gran agujero financiero en el sector de la energía. También tendrá que persuadir a Bruselas para desbloquear cientos de millones de dólares de los fondos de desarrollo europeo bloqueados desde el año pasado.
"Bulgaria necesita formar un Gobierno rápidamente y restaurar la estabilidad", ha dicho el presidente de la Confederación de Empleadores e Industrialistas de Bulgaria (KRIB, por sus siglas en idioma local), Ognian Donev. El presidente KRIB estima que "las nuevas elecciones dañaran los negocios" y desestabilizarán el país.
