Actualizado: jueves, 20 diciembre 2007 12:35


NUEVA YORK, 20 Dic. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Kosovo, Fatmir Sejdiu, aseguró anoche al término de la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU que está "dispuesto" a proclamar unilateralmente su independencia". Asimismo, aseguró que esta independencia "no se dirige contra nadie" y que el deseo de Kosovo es mantener "relaciones amistosas y de buena vecindad con Serbia".

Sejdiu está "dispuesto a tomar medidas con vistas a la declaración de independencia de Kosovo al lado de sus amigos", declaró el mandatario, citado por el centro de noticias de la ONU. "La independencia de Kosovo no está dirigida contra nadie", añadió.

A juicio del presidente, la reunión del Consejo "era la ocasión de expresar nuestro punto de vista sobre el presente y sobre el futuro de Kosovo". "Hemos llegado al final de un largo proceso con la 'Troika' y el plan (del enviado de la ONU, Martti) Ahtissari en el que todas las posibilidades de llegar a un acuerdo han fracasado", prosiguió.

De cara al futuro, aseguró el presidente, "es muy importante que formemos un nuevo gobierno democrático capaz de defender los derechos de todas las comunidades". "Nos comprometemos a mantener buenas relaciones en nuestra región y a preservar la estabilidad", aseguró. "Esperamos que en un futuro próximo podamos establecer igualmente relaciones amistosas y de buena vecindad con Serbia, como se ha propuesto en nuestro tratado de amistad y cooperación", añadió.

En todo caso, "el futuro de Kosovo pasa por la integración europea y atlántica, y sobre estas bases deseamos elaborar garantías sólidas para todas las comunidades que viven en Kosovo". El pueblo kosovar "no podrá olvidar los abusos cometidos contra él", pero desea mantener "buenas relaciones con el pueblo serbio y todos los pueblos de la región", concluyó.

El Consejo de Seguridad de la ONU concluyó anoche sin un acuerdo las consultas sobre el futuro estatus de Kosovo, tras revisar el informe final del grupo de contacto --la 'troika'--. En la reunión a puerta cerrada estuvieron presentes el primer ministro serbio, Vojislav Kostunica, el primer ministro electo kosovar, Hashim Thaçi, y el propio Sedjiu.

La Unión Europea y Estados Unidos han llegado a la conclusión, tras la reunión del Consejo, de que las posturas entre ambas partes son irreconciliables. Mientras que Pristina pugna por la independencia de Kosovo, Belgrado se opone rotundamente a ella y ha advertido de que sentaría un mal precedente y crearía inestabilidad en la región.

Este año, la ONU presentó un plan de su enviado especial para Kosovo, Martti Ahtisaari, en el que proponía la independencia de la provincia bajo supervisión internacional, pero fue rechazado por Serbia con el apoyo de Rusia. Desde entonces, las negociaciones pasaron a ser responsabilidad de la 'troika', formada por Estados Unidos, la Unión Europea y Rusia, pero tras cuatro meses las conversaciones no han derivado en una decisión consensuada.

Los albanokosovares han declarado reiteradamente que de no llegar a un acuerdo satisfactorio proclamarán la independencia, pero el Gobierno serbio ha advertido de que no aceptará ninguna decisión unilateral.